Angel María Villar ha conseguido que las urnas respalden por mayoría absoluta una gestión criticada con dureza desde diversos puntos del panorama futbolístico y que, por lo tanto, enfoque contra viento y marea su quinto mandato al frente de una RFEF que atraviesa por unos momentos de convulsión e incluso de judicialización.
Villar, con 98 votos a su favor frente a los 78 de Gerardo González, parecía llegar tocado a estas elecciones. Su respaldo y apoyo absoluto a dirigentes imputados en los procesos abiertos en los juzgados le granjearon duras críticas que no le hicieron arrojar la toalla. Al contrario, según ha reiterado, optó por presentarse a la reelección porque el mundo del fútbol se lo pidió y por ello en vez de afectado se sintió reforzado en pos de un nuevo mandato.
Àngel María Villar Llona nació en Bilbao el 21 de enero de 1950 y fue jugador del Athletic durante once años. Ingresó en el club bilbaíno el 19 de octubre de 1970 y se retiró del fútbol activo en 1981, después de debutar en la selección nacional en 1978, cuya elástica vistió en 22 ocasiones, la mayoría de ellas a las órdenes de Ladislao Kubala. El presidente de la Federación Española comenzó a jugar al fútbol en los infantiles del Athletic y antes de debutar en el primer equipo, pasó por el juvenil, el Galdakao y el Getxo. Con el Athletic consiguió la Copa del Generalísimo de 1973, un subcampeonato de esta competición en 1977 y el subcampeonato de la UEFA ese mismo año.