Ha pasado poco menos de una año desde que las piscinas de Son Hugo vivieran un momento histórico. El pasado Campeonato de España de natación de verano servía para consagrar a los deportistas de Balears y dejaba al Club Natació Palma en lo más alto del cajón. A poco menos de tres semanas para el inicio de los Juegos Olímpicos, las piscinas Picornell de Barcelona reunirá a los integrantes del equipo español en el que será el último gran test previo a la cita ateniense. Roser Vives y Marco Rivera calibrarán su potencial en una competición que les ha visto bañarse en oro, y que supondrá su despedida antes de poner rumbo hacia el gran objetivo de la temporada.
Sus opciones en 200 metros mariposa y 400 metros libres son las máximas, y en estas pruebas deben dar el máximo para demostrar que su camino hacia Atenas es el correcto. El relevo de 4x100 estilos femenino del Club Natació Palma tiene la misión de reeditar oro, aunque tanto en la categoría júnior como sénior, son muchas las bazas que Balears presenta ante las grandes figuras del panorama nacional. Las Zhivanevskaia, Villaécija o Peláez tendrán en los representantes del Palma, Voltor, La Salle y EBE a duros rivales. María Fuster y María del Mar Brunet son alternativas al cajón, sin dejar de lado la progresión de Javier Cardona, Isabel Pérez, Begoña Barrés o Teresa Planas, que quieren dejar alto el listón entre hoy y el domingo en la ciudad condal.
No puede pasar de largo el enorme número de expectativas que generan júniors de la clase de Carmen Muntaner, Melanie Costa, Irene Vidal o Miquel Payeras. Con el Campeonato de Europa aún reciente, tendrán una excelente oportunidad para reivindicarse y, de paso, ponerle las cosas difíciles al Sabadell y los restantes clubes que pujarán por el título nacional en un fin de semana que puede suponer la plataforma de lanzamiento para Roser Vives y Marco Rivera, los dos nadadores olímpicos mallorquines y dos puntos de referencia para España en los Juegos Olímpicos.