Elena Gómez ha iniciado la cuenta atrás para los Juegos Olímpicos. Tras regresar a la competición en la American Cup, la gimnasta mallorquina se mide a las mejores deportistas del mundo en la segunda prueba de la Copa del Mundo que se celebrará el próximo fin de semana en Lyon (Francia). Será el primer test fiable para comprobar el estado actual de la mejor gimnasta española.
Tras finalizar el Campeonato del Mundo de Anaheim (Estados Unidos) Jesús Carballo le dio vacaciones a todo su equipo. El desgaste de Elena Gómez había sido muy grande. En la primera jornada tuvo que exprimir al máximo sus cualidades para clasificar al grupo español para los Juegos Olímpicos de Atena 2004. La actuación de la mallorquina fue sobresaliente y el resto del equipo rindió a un buen nivel. Finalmente se logró el pasaporte olímpico y se finalizó en el quinto puesto. Pero desde su exhibición en Debrecen, Elena Gómez también entra en todas las quinielas en la modalidad individual. La gimnasta manacorina compitió en las finales de barra y suelo, logrando la medalla de bronce en suelo.
Había sido una competición y un año muy exigente. No sólo a nivel deportivo, sino también psicológico. Carballo pensó que debía darles un descanso y el periodo para recuperar el máximo nivel está siendo muy exigente. Elena Gómez se ha pasado cinco meses entrenando sin descanso y hace quince días regresó a la competición. En la American Cup finalizó en el séptimo puesto, aunque las puntuaciones tienen varias lecturas. Las notas de las cuatro estadounidenses son prácticamente imposible de conseguir en una competición internacional y son muy superiores a las del resto de gimnastas. Elena Gómez se movió en la puntuación que acostumbra a ser habitual en ella y confía en poder mejorar unas décimas en la cita francesa.