El Barcelona es el club español que peor suerte ha tenido en el sorteo de la segunda fase de la Euroliga celebrado ayer en la capital catalana, al tener que jugar con otros dos finalistas de 2003, el Benetton y el Montepaschi italianos, además de un rival del potencial del Panathinaikos griego. El Pamesa tendrá que medirse al anfitrión de la Final a Cuatro de este año, el reforzado Maccabi de Tel Aviv, además de al Ulker y el Zalgiris, mientras que el Tau ha quedado encuadrado con el CSKA de Moscú (el otro participante en la última Final a Cuatro), el Cibona de Zagreb y el Olympiacos.
Por lo que se refiere al sorteo del calendario, inmediatamente posterior al de los grupos, la fortuna tampoco acompañó al vigente campeón del torneo, que iniciará esta segunda fase como visitante en la pista del Montepaschi y la acabará en la cancha del Benetton Treviso, que se perfila como su gran rival en la pugna por una billete a Israel. Tampoco lo tendrá fácil el Tau, que afrontará los dos primeros compromisos lejos de su pabellón, aunque acabará en casa ante el Olympiacos.
El representante español más afortunado en este sorteo fue el Pamesa, que comenzará como local ante el Maccabi y cerrará la fase también en Valencia frente al Ulker. El denominado 'Top16' comenzará el próximo 3 de marzo y concluirá el 8 de abril tras la disputa de seis jornadas en las que se decidirá el nombre de los equipos que tomarán parte en la Final a Cuatro, que se desarrollará del 29 de abril al 1 de mayo. Cada club que logre la clasificación para Tel Aviv dispondrá de 1.200 localidades a repartir entre sus seguidores. Las entradas que la organización puso a la venta el pasado viernes se han agotado.