En busca de la piedra filosofal. Luis Aragonés no encuentra su once inicial. El entrenador del Real Mallorca no ha repetido equipo titular en ninguna de las catorce últimas jornadas y, en alguna ocasión, ha variado hasta cuatro piezas en relación al partido precedente. Es más, desde que eSabio de Hortaleza se hizo cargo de la dirección técnica, a mediados del pasado mes de octubre, sólo ha calcado el once inicial en dos jornadas consecutivas: ante el Deportivo en Riazor (0-2) y frente al Valencia en Son Moix (0-5). Desde aquella humillante derrota ante el conjunto ché, sufrida el pasado 2 de noviembre, Luis Aragonés jamás ha podido alinear al mismo equipo titular. Las sanciones o las lesiones tampoco han invitado a la continuidad. Los únicos jugadores que se mantienen en el once son Leo Franco y Gonzalo Colsa.
Dos demarcaciones se han convertido en el principal quebradero de cabeza. La principal apunta a la sala de máquinas. Con Gonzalo Colsa siempre en la pizarra, el cántabro ha tenido hasta tres parejas de baile desde el inicio. La apuesta principal de Luis ha sido Nagore, con ocho presencias en el once titular en esas catorce últimas jornadas. Marcos entró en cuatro, mientras que Nadal salió de inicio en dos ocasiones. En tres jornadas consecutivas, ante Celta, Racing y Zaragoza, esa posición cambió de nombre.
La pareja de centrales también ha originado debates internos. Lussenhoff se mantiene en el once desde la undécima jornada, aunque la próxima deberá descansar por sanción. Niño, Nadal y Olaizola -frente a la Real Sociedad- han ocupado esa plaza. El carril izquierdo es otro foco de cambios. Con Poli en la enfermería, Luis recurrió a Toni González e incluso cambió de banda a Javier Olaizola para taponar esa zona. Otra lesión, la de Campano, propició algunas permutas en el carril diestro, del que se ha adueñado Finidi George en las últimas jornadas. Nené, salvo excepciones, es fijo en la izquierda, mientras que Bruggink y Correa se han turnado en ataque por la ausencia de Etoo y la llegada de Delibasic.