El consejo de administración del Real Mallorca acordó ayer realizar un «esfuerzo» económico para intentar mejorar las prestaciones del equipo, según anunció el presidente Mateu Alemany. El dirigente explicó que sólo llegarán refuerzos «si mejoran la actual plantilla», y le hizo un guiño a la renovación de Aragonés: «El club está encantado con él, y si él lo desea, se quedará», dijo. Fue un consejo de «reflexión», en el que se ratificó la contratación de Edu Moya y en el que se habló abiertamente de nuevas incorporaciones. El club pretende cerrar algunos fichajes que ayuden a cambiar la actual dinámica del equipo, y para ello va a tirar de talonario, siempre dentro de los márgenes de la prudencia: «No se trata de fichar por fichar. No es una cuestión de cantidad sino de calidad. El futbolista que venga debe aportar cosas al equipo, porque si no es así, no vendrá», aseguró el mandatario isleño. Mateu Alemany dijo que la llegada de jugadores no está vinculada a una mala planificación durante la pretemporada, y subrayó que fue un verano «complicado» para diseñar una plantilla porque la ampliación de capital dio poco margen de maniobra.
Interrogado por las palabras de Luis, en las que anunciaba que si el club quiere, seguirá una temporada más al frente del equipo, el presidente aseguró que «el club está encantado con Aragonés; si nosotros deseamos que se quede, y él lo desea, se quedará. No tenemos una fecha concreta para hablar de su renovación, pero no lo dejaremos para final de temporada. Será antes, porque es invariable a los resultados que tenga el equipo», agregó. Alemany espera que Etoo esté finalmente el domingo ante el Racing porque «sería el mínimo de justicia posible» y se refirió a la situación en la que vive Ligüera: «Si se marcha o no lo definirán los técnicos, como con cualquier otro jugador. Es cierto que es un caso sorprendente, porque ha estado entre los mejores goleadores del año pasado, pero eso son cosas del fútbol». Tampoco quiso pasar por alto la marcha del yugoslavo Jovan Stankovic y enfatizó que el club está «por encima de intereses particulares».Por último, el dirigente mallorquinista comentó que estaba «sorprendido» por la escasa repercusión mediática que ha tenido el hecho de que el Mallorca estuviera en el número 22 del ránking de la FIFA de la pasada temporada, y que además fuera el tercer mejor equipo de España: «Eso demuestra que tan mal no estaremos haciendo las cosas», concluyó el presidente bermellón, molesto por las críticas que han recibido últimamente.