Fernando Castán|MADRID
El año que finaliza pasará a la historia como el del descubrimiento
para el gran público de una nueva estrella de la natación: el
norteamericano Michael Phelps, que fue la figura de los Mundiales
de Natación de Barcelona, en julio, y que sirvió a Estados Unidos
para recuperar la hegemonía internacional. En España fueron Nina
Zhivanevskaya, David Meca, Erika Villaecija, Melissa Caballero y
Roser Vives en natación; y Gemma Mengual, en sincronizada, los que
destacaron a lo largo del año.
En 2003 brilló la española de origen ruso Nina Zhivanevskaya que, junto a David Meca en aguas abiertas, dio al equipo nacional las medallas de natación en Barcelona 2003. Después de ser cuarta en la que en teoría era su máxima especialidad, la prueba de 100 espalda, sorprendió en la de 50 metros del mismo estilo con un oro. A los 12 récords mundiales, 8 europeos se sumaron 12 de España. En la piscina del Palau Sant Jordi también brillaron por parte española Angela San Juan en 50 mariposa, Roser Vives en 200 mariposa, con dos octavos puestos, y, sobre todo, el relevo de 4x200, formado por Erika Villaecija, Melissa Caballero, Tatiana Rouba y Laura Caballero, quintas en la final.
Además, Villaecija, de 19 años, y Caballero, de 18, pusieron de manifiesto en diciembre que el futuro de la natación española pasa por ellas. La primera ganó la medalla de oro de los europeos en piscina corta, en Dublín, en la prueba de los 800 metros, batiendo nada mas y nada menos que a la alemana Stockbauer, y Caballero se hizo con el bronce en los 400 metros. Las dos nadadoras barcelonesas son la más clara esperanza, junto a Zhivanevskaya, de cara a los europeos absolutos de Madrid el próximo mes de mayo y en los Juegos Olímpicos de Atenas. David Meca estuvo a punto de subir a lo más alto del podio en los 25 kilómetros de aguas abiertas, pero el ruso Kudinov lo impidió en la última brazada, por lo que tuvo que conformarse con la plata.