La primera reválida para el Son Amar Palma llega ante el enemigo más temido. El conjunto de Ernesto Rodríguez se ve las caras (12 horas) con la única escuadra que puede plantar cara al líder de la Superliga, que puede refrendar esta condición si sale victorioso de Almería, donde Unicaja, el eterno campeón, debe hacer valer el factor pista para frenar la imparable trayectoria del Son Amar.
Sin haber perdido ni un sólo set y ofreciendo un rendimiento aplastante, Son Amar Palma llegó en la tarde de ayer a tierras andaluzas con la misión clara de marcar distancias antes de medirse con el resto de aspirantes a la corona. Ernesto Rodríguez dispone de todos sus efectivos, a excepción de Miguel Àngel Falasca. El colocador sufre una fractura espidoidea en uno de los dedos de su mano y estará tres semanas de baja, aunque el Dani Ruiz demostró ante Emi Gijón que puede suplir a la perfección la ausencia de una de las piezas imprescindibles dentro del engranaje del Son Amar Palma.
Por su parte, Luis Díaz y Juan Carlos Vega han superado los ligeros problemas de salud que arrastraron a lo largo de la semana y podrán estar sobre la pista en el momento más señalado dentro del tramo inicial de la competición regular. Y es que ganar al Unicaja en su propia cancha tendría un enorme valor dentro de los planes más inmediatos y de futuro del club presidido por Ricardo Ramos, que puede quedarse sólo en cabeza de la Superliga si los planes salen tan y como se espera.
Regreso
Para algunos de los miembros del plantel del Son Amar Palma, la
cita ante Unicaja Almería supone un momento especial. Ernesto
Rodríguez, José Luis Moltó, Jorge Elgueta y Juan Carlos Vega han
transitado en alguna fase de su vida deportiva por el club más
laureado de la historia contemporánea del voleibol español y a día
de hoy se presentan como hipotéticos verdugos de los pupilos de
Fernando Muñoz, un conjunto diseñado para mantener la hegemonía
estatal y asaltar la máxima competición continental de clubes, la
gran asignatura pendiente de un proyecto cargado de argumentos como
para seguir redactando páginas de gloria.
La plantilla del Unicaja Almería tiene a dos claros referentes nacionales. El colocador Cosme Prenafeta y el central Juanjo Salvador son insustituibles y deberán ser vigilados muy de cerca por los hombres de Ernesto Rodríguez. El líbero Manuel Berenguel es otra de las claves del cuadro andaluz, que posee efectivos llegados del extranjero que redondean un grupo plagado de talento en todas sus posiciones. Brett Youngberg y Gustavo Scholtis, con 204 y 205 centímetros, respectivamente, permiten que Unicaja sea el equipo con la media de altura más elevada de la Superliga.
Con estos inconvenientes y una pista en la que la afición acostumbrada a convivir con la gloria, el Son Amar Palma deberá pugnar por un triunfo que se antoja vital para que el proyecto de Damià Seguí y Ricardo Ramos salga adelante y progrese adecuadamente dentro de la Superliga Masculina, cuyos dos pesos pesados se cruzan por primera vez en una final casi anticipada.