La natación balear alcanzó el pasado fin de semana el techo nacional sin salir de la Isla. La celebración del Campeonato de España en las piscinas de Son Hugo coincidió con una eclosión por parte de la representación mallorquina, que encontró en la piscina palmesana un enclave idoneo en el que desarrollar sus reivindicaciones. Dentro de esa delegación, el papel más espectacular le correspondió al equipo femenino del Club Natación Palma, que en un alarde de convicción se coronó como la mejor escuadra de la competición y encarnó el mayor el éxito que ha cosechado este deporte en la Islas durante los últimos tiempos.
Roser Vives, María del Mar Brunet, María Fuster, Carmen Muntaner y Teresa Planas personalizan la cara más amable de los campeonatos y una vez asumida su cuota de protagonismo, valoran la hazaña en la piscina como el premio a un sacrificio de muchos años del que ahora pueden recoger su fruto en forma de victoria.
Todas ellas coinciden en señalar que el nacional llegó en un momento inoportuno y que el calendario, muy condensado durante toda la temporada, no benefició en absoluto su plan de preparación para las pruebas que debían disputar. Sin embargo, sus registros se adaptaron a todo tipo de exigencias y como se vió posteriormente, su estado de forma se prolongó por espacio de las cinco jornadas en las que fue necesario. «Dos días antes sólo me quejaba de que no me encontraba bien» señala Roser Vives, algo que también destacan María Fuster y Teresa Planas, que sufrieron los efectos de la gripe en las cercanías del campeonato.