El Mallorca se impuso a la Real Sociedad por 0-1, en un partido marcado por las escasas oportunidades de gol, donde las defensas se impusieron a los ataques. Tuvo que esperarse al último minuto del partido, para que el Mallorca, en una jugada a balón parado, rubricara una sensacional semana, con tres triunfos consecutivos ante el Barcelona, el Real Madrid y, por último, contra la Real Sociedad, que sigue sin saber lo que es ganar en Anoeta, hundiéndose, si cabe, aún más en la clasificación.
Ninguno de los dos equipos tuvo profundidad suficiente durante los primeros 45 minutos como para inquietar a los guardametas contrarios. Tan sólo los lanzamientos de falta y los saques de esquina sirvieron para llevar algo de peligro, ante la consigna de no arriesgar el balón que parecían tener ambos conjuntos.
Sin embargo, en el minuto 90, los hombres de Luis Aragonés se llevaron el triunfo tras una jugada de estrategia. Satnkovic lanzó una falta desde la banda izquierda, que Nadal acertó a rematar de cabeza al fondo de la red. El Mallorca se llevó así un partido en el que especuló en exceso con el balón, aunque hizo valer su mayor temple a la hora de sacar partido a las escasas llegadas de peligro.