Sin apenas sobresaltos y con un sólo cabeza de serie eliminado, el sueco Magnus Gustafsson, el torneo Conde de Godó vivió el estreno de la cuadragésima séptima edición. Casi todos cumplieron con su papel, nadie se salió del guión previsto. Alberto Berasategui, que todavía no había ganado un partido este temporada, logró estrenarse con la llegada a la tierra. El vasco ganó cómodamente a un rival sin entidad, el francés Arnaud di Pasquale (6-3 y 6-2), y ya está en segunda ronda.
También debutó con victoria Andrew Ilie, un joven jugador llamado a empresas mayores. El australiano ganó con claridad a un tenista bregado en mil batallas, el alemán Marc Kevin Goellner, que nada pudo hacer ante el ágil juego de Ilie (6-4 y 6-3).
Quien volvió a cumplir las expectativas, pero en negativo fue
Julián Alonso, que perdió ante Francisco Clavet y demostró que debe
madurar mentalmente.
El madrileño sabía cómo podía acabar con la paciencia de Alonso y
le ganó por un doble 6-4. Quien lo pasó muy mal sobre la pista fue
Carlos Costa, igualó a un set en su partido ante el rumano Andrei
Pavel y después sufrió un desfallecimiento en la tercera manga. El
ruso Marat Safin, una de las sorpresas de la pasada edición, pasó
también tras dejar sin opciones al español Oscar Serrano, aunque
éste le forzó en el segundo set hasta el 7-5 final.