La temporada 2010 está llamada a ser la que hizo a Jorge Lorenzo pulveriza el grueso de los registros del Mundial de MotoGP. Con el título cada semana más cerca, el mallorquín ya está entre los diez mejores de todos los tiempos en proporción carreras-victorias-podios, pero ayer, en Montmeló, se encargó de advertir que su nombre va a quedar para los anales del motociclismo.
Tanto, que al sumar su décima victoria en MotoGP (31 acumula en total), sigue como el cuarto piloto español con más triunfos en el Campeonato (Àngel Nieto, Aspar y Pedrosa, este último con 32 están por delante), pero además, es el segundo en la categoría reina, con diez, uno más que Pedrosa y Gibernau, y se coloca a cinco del único nacional que ha ganado la corona en su momento de 500 centímetros cúbicos. Sus tres primeros puestos de forma consecutiva le dejan a uno de igualar los cuatro que encadenó Crivillé el año de su coronación (1999).
Huracán
El 'martillo' de Lorenzo le permite a su vez ser uno de los mejores en los entrenamientos oficiales. No en vano, en su trayectoria suma 38 'poles', lo que le deja a cuatro de la marca de referencia de Jorge Martínez 'Aspar', habiendo rebasado incluso al legendario Àngel Nieto.
Pero en el presente, Jorge afronta un reto de alto voltaje. El récord que en MotoGP tiene establecido Valentino Rossi desde 2005 le permite presumir del mejor arranque en un Campeonato. Si Jorge ha sido capaz de 'jubilar' al de Tavullia, dentro de un par de semanas, con motivo del Gran Premio de Alemania, que se disputará en el circuito de Sachsenring, una nueva victoria dejaría atrás el récord de 'Vale', cuya marcha a Ducati es un hecho sólo pendiente de confirmación oficial por parte de ambos bandos.
No en vano, Lorenzo ha conseguido cinco victorias (Jerez, Le Mans, Silverstone, Assen y Montmeló) y dos segundos puestos (Qatar y Mugello), o lo que es lo mismo, 165 puntos tras siete Grandes Premios. En ocho pruebas, Rossi consiguió 186, fruto de seis primeros puestos, un segundo y un tercero. Si Lorenzo gana en Alemania, batirá con 190 puntos la gesta que llevó al título a Valentino hace cinco años, ya con Yamaha.