París 2024 puede ser el escenario en el que el deporte balear pulverice de nuevo sus récords olímpicos. Ya lo hizo en las dos últimas ediciones de los Juegos, por un lado con diecinueve representantes en Tokio, y por otro con seis medallas cinco años antes en Río de Janeiro 2016. Lanzado el periodo de clasificación y con plazas todavía por definir, cerca de una decena de isleños ya tienen garantizada su plaza nominal, otros deberán ganarse el billete y su presencia en las listas y algunos todavía persiguen su clasificación a través de los ránkings o los torneos preolímpicos por dirimirse.
La vela fue la más madrugadora de todas, manteniendo la cuota mallorquina tras dos décadas de ausencia. Paula Barceló, que buscará subir al podio en la clase 49erFX junto a Támara Echegoyen tras ser cuartas en Tokio, y el joven Nacho Baltasar, opción para plantear batalla en la espectacular iQFOiL, navegarán por las aguas de Marsella con la meta de dar continuidad al bronce de Joan Cardona en Finn y, en el caso de la regatista del Club Nàutic s'Arenal, ser la primera mujer balear en ganar una medalla olímpica en este deporte tan laureado a escala isleña.
En la piscina, las noticias son buenas en varios frentes. Dos deportistas ya han asegurado su presencia en París en diferentes modalidades, una de ellas de estreno. Es el caso de los saltos, donde Adrián Abadía será el primer balear olímpico en esa especialidad. Lo hará en trampolín de 3 metros sincronizados junto al canario Nicolás García Boissier tras ser bronce en el pasado Mundial de Doha, y después de rozar la clasificación para Tokio y moverse en el Top 5 internacional durante el grueso del ciclo.
La natación tampoco fallará. De hecho, Son Hugo repartirá a finales de junio los últimos billetes, aunque ya los hay con plaza garantizada. Es el caso de Hugo González de Oliveira, campeón del mundo de 200 espalda y subcampeón en 100 espalda en Doha, además de campeón continental de 200 estilos. En estas tres pruebas nadará el deportista nacido en Palma, aunque formado en Madrid y actualmente enrolado en la NCAA estadounidense.
A él se unirá Sergio de Celis, que en 100 libre ha demostrado una solvencia que le lleva a ser plusmarquista nacional, es un fijo en unos relevos en los que España ha firmado una progresión excepcional. En los Trials de Palma quedará certificada su presencia, con las cuartetas de 4x100 y 4x200 libre y el 4x100 estilos en su hoja de ruta.
El piragüismo es una baza segura en los últimos años. Desde 2012 no falla al podio y en París 2024 tiene asegurada la presencia de Marcus Cooper Walz con el K4 500 metros español, subcampeón olímpico, y con la bala en la recámara del K2, buscando más medallas que unir a las dos que luce el palista del Real Club Náutico del Portopetro y potencial abanderado español. La presencia se puede doblar con el regreso de la canoa de la mano de un Joan Toni Moreno que peleará en la Copa del Mundo de Szeged por un billete en C2 500 metros formando embarcación con Diego Domínguez.
Otro clásico es el ciclismo, que aspira a doble cuota en sendas modalidades. La pista ya tiene cerrada la plaza del menorquín Albert Torres, que vivirá sus terceros Juegos en París 2024 con la Madison como primera baza, formando pareja con su inseparable Sebastián Mora, con quien dirimirá el billete para el Omnium olímpico en el velódromo de Saint-Quentin-en-Yvelines. En la ruta, Mavi García será la gran esperanza española de nuevo, mostrándose fiable con las grandes estrellas del pelotón, y la presencia de Enric Mas, que llegaría tras el Tour de Francia, no se descarta.
La gimnasia artística volverá a estar presente. La masculina, más concretamente, con un Nicolau Mir (Xelska Illes Balears) indiscutible en el equipo español, además de tener protagonismo en el concurso individual. El Europeo de Rimini (24 a 28 de abril) determinará la lista final, en la que también tiene serias opciones de entrar otro mallorquín, Adrià Vera (CG Palma).
El fútbol promete emociones fuertes. Y en dos frentes, pues Chadi Riad podría tener protagonismo con la selección de Marruecos. El central del Real Betis es un habitual y con 21 años recién cumplidos podría cumplir su sueño olímpico. Como a buen seguro lo harán dos campeonas del mundo que formarán parte del histórico equipo español femenino que debutará en unos Juegos: Mariona Caldentey y Cata Coll. Dos piezas indiscutibles para Montse Tomé que, salvo lesión o sorpresa, estarán en los Juegos.
Allí tendrá que ganarse su billete la selección masculina de baloncesto, en la que Rudy Fernández aspira a ser leyenda con seis participaciones, aunque antes deberá pasar por el trago del Preolímpico de Valencia. El menorquín Sergio Llull y Álex Abrines también están en la órbita del técnico Sergio Scariolo, mientras que en el combinado femenino, ya clasificado para París 2024, Alba Torrens es insistituible, buscando sus cuartos Juegos y pelear por otra medalla ocho años después en la que parece será su última aparición olímpica. Helena Pueyo está en seguimiento, mientras que en el 3x3, María España o Juana Camilion han asomado la cabeza en una modalidad que aguarda su último Preolímpico para completar el cuadro.
Roland Garros y el tenis esperan a su rey, a la espera de saber cuál es la evolución y cómo es la puesta a punto de Rafael Nadal, que llegaría a través de una invitación como vía prioritaria, soñando con dar forma a un doble para los anales con quien está llamado a ser su sucesor: Carlos Alcaraz. Las opciones vía ránking de Jaume Munar son contadas.
Otros deportistas baleares que podrían llegar a los Juegos son la jugadora ibicenca de balonmano Paulina Pérez Buforn, que ha entrado en la lista de la selección absoluta antes de sellar su pasaporte a París días atrás, además del skater Jaime Mateu, olímpico en Tokio aunque con remotas opciones. En lucha, el Preolímpico de Estambul será el último tren para Taimuraz Friev, Graciela Sánchez o Levan Metreveli a la búsqueda de recoger el testigo de los hermanos Moisés y Fran Sánchez.
En el último momento se sabrá si el atletismo repite, con Daniela García, José Ángel Pinedo o Daniel Castilla como algunas de las esperanzas de clasificación olímpica que también ansía por ránking la triatleta Xisca Tous, que compite por Turquía, toda vez que Mario Mola ha ido alejándose de la distancia a lo largo de este ciclo, en el que España tiene plaza también en el relevo mixto.
En total, más de treinta deportistas baleares tienen posibilidades, por mínimas que sean, de competir en París 2024 en cerca de una quincena de modalidades, con diferentes franjas de edad y en diferentes sedes como Nantes, Burdeos, Marsella o Saint Etienne.