El centrocampista mallorquín Sergio Darder, que ya iniciada esta temporada dejó el Málaga para fichar por el Olympique de Lyon francés, ha afirmado que exigió su salida del club andaluz al sentirse «utilizado».
El futbolista, de 21 años, que llegó a los escalafones inferiores de Málaga en la campaña 2012-13 procedente del filial del Espanyol, ha remitido este domingo una carta a los medios de comunicación en la que pide disculpas a la afición malaguista por la precipitada marcha y explica sus motivos para ello.
«Yo no controlé los tiempos del traspaso, ni conocía la venta de mis derechos a un inversor. Yo exigí que me dejaran salir porque me sentía utilizado. Llevaba dos años en el mercado por expreso deseo del club. Ahora te vendo, ahora no te vendo. Ahora tráeme una oferta, esta oferta me gusta, la que antes me gustaba ahora no, prepara la maleta que te vas y después no. Sácate los billetes que sales mañana, ahora no; esta tarde tienes que ir al aeropuerto, hemos decidido finalmente que no... Y así un largo etcétera», relata Darder en su carta abierta.
El centrocampista precisa que si no ha hablado hasta ahora, pese a que su traspaso se produjo a finales de agosto, fue porque quería hacerlo personalmente en Málaga pero que «los compromisos» con su nuevo club le «hacen inviable viajar» y que tampoco ha querido hacer público su comunicado antes porque «la situación deportiva del Málaga CF no era buena» y no quería «interferir negativamente» con sus palabras.
«Quiero pedir perdón a la afición del Málaga. Entiendo el malestar que mi salida ha generado entre la hinchada. Yo sí pido perdón. En mi afán no estaba ofender a nadie ni generar todo lo ocurrido durante el proceso de mi venta. Guardé silencio y me mantuve al margen, por mucho que otros se empeñasen en filtrar aquello que creían oportuno faltando a la realidad. No estoy orgulloso de cómo se produjo mi marcha de Málaga y cada aficionado, por supuesto, tiene el derecho a opinar sobre ella», argumenta en su escrito.
El balear relata que entendió que esta inestabilidad no era lo mejor para él y, desde ese instante, le expresó su deseo al club de irse, inclusive le pidió «al señor Al-Thani -propietario del club- que lo permitiera, a través de un mensaje personal».
«Es muy posible que mis formas no estuvieran a la altura, cierto. Pagué la novatada y lo reconozco, por eso pido perdón. Insisto, no estuve a la altura de la afición. Tras mi fichaje yo no controlé cuándo se firmaban los documentos en Barcelona, ni cuándo me iban a presentar. Entiendo el enfado del malaguismo por la coincidencia del anuncio del traspaso con el partido de mis compañeros en el Camp Nou. Asumo mi culpa, pero todos saben que esto en concreto no dependía directamente de mí», enfatiza.
«Insisto en que lo poco que soy es gracias al Málaga y a su afición. Agradezco su confianza a Schuster y Javi Gracia -sus dos entrenadores en el equipo-, con sus correspondientes cuerpos técnicos al completo, y a Manel Casanova -directo de los escalafones inferiores del club-. A mis compañeros, a los empleados del club y, sobre todo, a la afición, que hasta el ultimo momento supo comportarse conmigo de manera ejemplar», añade Darde en su extensa misiva.