Sergio Ramos, defensa del Real Madrid, aseguró que su equipo, tras ganar 4-0 al Getafe, llega bien «anímicamente» al partido de Copa del Rey que disputará ante el Barcelona el próximo miércoles en el estadio Santiago Bernabéu.
«Yo ahora sólo me preocupo de mi equipo. Anímicamente, llegamos bien al partido, pero en un clásico puede pasar cualquier cosa. Pero esto da muchas vueltas. Como siempre he dicho, el Madrid está obligado a luchar por todas las competiciones», declaró.
También habló sobre los porteros de la plantilla y afirmó que todos cuentan con el afecto de los jugadores y el cuerpo técnico: «A Adán, no somos nadie para designarle un papel más o menos importante. Tiene que aprovechar la oportunidad. A Iker le muestro cariño por el tiempo que llevamos juntos, y a Adán también, por ser un chaval de la cantera. Igual que a Diego Lopez, un compañero. Hay que tener abiertas las puertas a todos», indicó.
Por último, comentó que el vestuario madridista «está bien» y habló sobre las declaraciones de su presidente, Florentino Pérez, que esta semana desmintió un información que desvelaba una comida con los dos capitanes en la que éstos habrían dado un ultimátum sobre la presencia de José Mourinho la próxima temporada.
«Como dijo el presidente, tuvo que matizar algo que era una gran mentira. Nosotros lo apoyamos. Pero en el Madrid todo va muy rápido y no estamos para volver a temas anteriores. Hay que pensar en los partidos», concluyó.