Quedan 10 jornadas, el Mallorca totaliza ya 35 puntos y descansa sobre un colchón de ¡9! por encima del descenso. El equipo isleño dio ayer en Valencia un paso de gigante en su carrera por la salvación. Se encuentra la escuadra de Laudrup en la dirección correcta. En la travesía que desemboca en la permanencia. Instalado en una cómoda novena plaza -empatado con la Real Sociedad- el grupo balear divisa la línea de meta con los bolsillos cargados de munición.
Los isleños se encuentran a prácticamente siete puntos de alcanzar los 42 puntos y atar virtualmente la salvación. Es decir, apenas necesita una cuarta parte de los 30 puntos en juego, para certiticar su permanencia, una temporada más, entre la nobleza del fútbol español. Y eso, teniendo en cuenta que los tres equipo que actualmente ocupan el furgón de cola (Almería, Hércules y Málaga con 26 puntos) sumen al menos la mitad del botín que hay en juego...
Aunque los agoreros todavía portan la llama del pesimismo, el Mallorca está saboreando su objetivo. Con nueve puntos por encima y nueve enemigos por debajo en relación al infierno, el conjunto bermellón divisa la Tierra Prometida.
Las últimas capturas a domicilio -empates en Pamplona y Valencia y triunfo en Cornellà- han allanado el camino de un Mallorca que se juega una porción notable de su destino en las dos próximas entregas. Las citas del próximo sábado ante el Zaragoza, en el Iberostar Estadi, y de la siguiente semana frente al Deportivo en Riazor, se antojan decisivas para alcanzar el éxito.
El grupo de Laudrup abre el último decenio del campeonato en una posición inmejorable. En casa, debe recibir a Zaragoza, Sevilla, Getafe, Villarreal y Atlético de Madrid. Fuera, visitará a Deportivo, Málaga, Racing, Hércules y Almería. Es decir, por Son Moix desfilarán equipos de la zona alta -con la excepción del conjunto maño-, mientras que a domicilio se cruzará con enemigos en plena lucha por la salvación, como por ejemplo los que actualmente ocupan las posiciones de descenso a Segunda División.
A cuatro de Europa
El Mallorca está firmando su segunda mejor campaña a estas alturas del curso de las ocho últimas temporadas. Los 35 puntos que suma en la actualidad solo son superados por los 47 que sumaba el curso anterior a falta de diez capítulos para cerrar el libro. Se encuentra a cuatro puntos de la última plaza que da acceso a la Europa League -el Atlético de Madrid y el Sevilla comparten esa posición con 39- y en una cómoda posición en relación a los equipos que pelean en las cloacas de la clasificación. Ambos deben visitar Son Moix en esta recta final de temporada.
Por delante de los tres últimos aparece el Sporting de Gijón con 29 puntos, Zaragoza y Racing de Santander con 30 y el Deportivo de la Coruña con 31 puntos.
Consciente de la importancia de explotar el sábado en casa el punto obtenido ayer en Levante, la plantilla de Laudrup se ha conjurado para alcanzar la cota de los 40 puntos lo antes posible. No quiere agobios de última hora y por ello los encuentros ante Zaragoza y Deportivo se han marcado en rojo en la caseta bermellona. Después llegarán las citas ante el Sevilla de Gregorio Manzano, en Palma, y el Málaga de Pellegrini, en La Rosaleda. Cuatro partidos para atar la permanencia. De momento, gracias al punto obtenido ayer en el Ciutat de València y a los resultados de la jornada, se encuentra en la dirección correcta.