El Mallorca saca la brújula y pone el contador a cero. El equipo de Laudrup, reforzado por su representación en el prólogo de la Liga, se adentrará a partir de esta tarde en la primera zona de conflicto del calendario. Y aunque sigue siendo pronto para calibrar el progreso de un grupo en construcción, el técnico danés obtendrá hoy el diagnóstico inicial del proyecto. Se mide la escuadra balear a un conjunto de su misma talla y pelaje, en un ambiente poco propicio y con el recuerdo todavía fresco de la debacle de la temporada anterior. Y el de Copenhague, que ha utilizado precisamente eso para estimular a sus hombres, espera que el equipo empiece a ofrecer algunas pistas fiables acerca de sus principales virtudes y defectos (El Molinón, PPV, 17.00 horas).
Aseguraba Laudrup en su comparencia previa al encuentro que le ha sentado bien al Mallorca la primera parada técnica de la competición. Según el preparador, la falta de actividad del pasado de fin de semana ha ayudado a digerir mejor el empate ante el Mou Team y la posterior cascada de elogios que recayó sobre el vestuario. Sin embargo, advierte también el danés que hoy el equipo se encontrará un escenario muy diferente al del capítulo inicial, que arranca su Liga. Argumentos no le faltan. Los bermellones cuajaron una actuación enorme frente a uno de los gigantes del fútbol europeo, aunque seguramente sus sentimientos estuvieran sobredimensionados por el bautismo del proyecto y el propio tamaño de la cita. Pero nada de aquello servirá esta tarde y es bastante probable que su ritmo de carrera en esta primera fase de la temporada dependa de lo que recopile en la pradera de El Molinón.
Tampoco lo ha tenido fácil el técnico para preparar su primera ofensiva como foráneo desde el banquillo bermellón. Los problemas físicos de algunos futbolistas le han impedido trabajar a pleno rendimiento en los días de mayor carga y ayer, al redactar la lista de convocados, tuvo que dejar fuera a Pep Lluís Martí, que no ha llegado a tiempo por un contusión en el vasto externo del muslo izquierdo. Laudrup, que no era partidario de forzar al mallorquín pensando en la que se le viene encima la próxima semana, tendrá que improvisar en el círculo central y reforzará la sala de máquinas con un trivote formado por Iván Ramis, Tomás Pina y De Guzman.El holandés se incrustará por detrás de Cavenaghi, la referencia ofensiva.
Aparte del contratiempo que ocasiona la ausencia de Martí y la imposibilidad de contar con Joao Víctor y Edson Ramos, el entrenador no tiene que lamentar más bajas y ha citado a 19 hombres que se quedaron concentrados anoche en Oviedo, entre los que destaca la presencia del catalán Sergio Tejera. Así, Laudrup podrá armar un once convincente en el que Cavenaghi tiene muchas opciones de estrenarse como titular. La Liga ya está en marcha, pero hoy se inaugura el camino del Mallorca.