La Federació de Futbol de les Illes Balears (FFIB) celebró ayer en su asamblea general marcada por el consenso que permitió trazar la hoja de ruta que seguirá el deporte rey en las Islas.
La asamblea aprobó sus cuentas de 2009 y su presupuesto para 2010, que se sitúa en 1.078.000 euros para 2010, mientras que los árbitros y los entrenadores tienen una previsión de 383.000 y 125.000 respectivamente.
Entre las medidas adoptadas destaca el cambio en el sistema de competición para los más pequeños. En la 2011-12 los alevines jugarán con el formato fútbol 7 y la irrupción en el campo grande y en los partidos once contra once se producirá a partir de la edad infantil.
Además, se aprobó trabajar en la ampliación la máxima categoría juvenil autonómica hasta los 18 equipos, mientras que se acordó suprimir las divisiones de tercera regional en cadetes, infantiles y alevines.
El presidente Miquel Bestard, que presentó el plan para doblar en cuatro años la subvención que el fútbol en edad escolar recibe del Consell de Mallorca en concepto de arbitrajes, dejó constancia de la postura de la FFIB de solicitar a los clubes el consenso para no cobrar entrada en los partidos de las categorías inferiores.
Por otro lado, Bestard anunció las medidas de gracia que la FFIB tomará en consonancia con la Española tras el triunfo de la selección en el Mundial. En la faceta de sanciones, cabe resaltar que la asamblea aprobó la inhabilitación por seis años a las personas que hayan formado parte de una junta directiva en un club que haya dejado deudas pendientes con cualquiera de los estamentos.