Los Cleveland Cavaliers llevan un récord de 51 victorias y 10 derrotas. Son primeros en la conferencia este y ya están clasificados de forma matemática a los 'playoffs'. No contentos con eso, también han consumado, por tercera vez esta temporada, una racha de 10 victorias consecutivas.
A pesar de el triunfo actual del equipo, los Cavs no son históricamente reconocidos como un equipo ganador en la mejor liga de baloncesto mundial. La franquicia llegó a la NBA en 1970 y durante sus inicios, los de Ohio eran reconocidos por ser un equipo perdedor que carecía de competitividad.
Participaron en postemporada por primera vez en la temporada 1975-76, liderados por Nate Thurmond. Durante los siguientes dos años volvieron a clasificarse pero sin conseguir alcanzar unas finales de conferencia en ninguna de sus participaciones. En 1980, Ted Stepein, recordado como el peor propietario de la historia de la NBA, se convirtió en propietario del club y empezarían sus peores años. El equipo quedaba último cada temporada y además consiguieron el récord de la racha de derrotas más largas con 24 seguidas. Ted Stepein llegó a traspasar 5 primeras rondas del 'draft' consecutivas (del 1982 al 1985). Este suceso hizo que el propio David Stern, presidente de la competición, interviniera creando la «regla Stepein», que impedía que un equipo traspasara elecciones de años consecutivos. Además del mal rendimiento del equipo, en la temporada 1982-83, los Cavaliers solo tuvieron una media de 3900 espectadores en sus partidos como local a pesar de que su pabellón tenía capacidad para más de 20000 personas.
Después de estos duros años, los hermanos Gund compraron el equipo y llegaron a tener buenos años de participar en playoff con jugadores como Mark Price, Brad Daugherty o Larry Nance y el entrenador Lenny Wilkens. En 9 años clasificaron a postemporada en nueve ocasiones pero lo mejor que consiguieron fue disputar las finales de conferencia en la temporada 1991-92 donde perdieron contra los Chicago Bulls de Michael Jordan.
Los años posteriores fueron bastante malos para la franquicia hasta que en 2003, seleccionaron a un joven alero de Ohio llegado directamente desde el instituto llamado LeBron James, quien ya era visto como el heredero del trono de Michael Jordan, con la primera elección en el que es considerado uno de los mejores drafts de la historia.
Durante los siguientes años el equipo se volvió muy competitivo y hasta llegaron a alcanzar las finales de la NBA en 2007, donde acabarían cayendo contra unos San Antonio Spurs liderados por Tim Duncan. El 2010 fue un punto crítico para los de Ohio, debido a que LeBron James decidió no extender su contrato para unirse al super equipo de Miami Heat junto a Dwayne Wade y Chris Bosh. Para muchos esta salida fue vista como una traición, ya que el apodado 'el rey' había prometido darle a Cleveland su primer anillo de campeón. Durante los siguientes 4 años, los Cavaliers fueron de los peores equipos de la liga pero aprovecharon para ir incorporando talentos universitarios como Kyrie Irving, rookie del año en 2012 y pieza fundamental en el futuro del equipo; Anthony Bennet, recordado como una de las peores primeras elecciones de la historia; y Andrew Wiggins, traspasado inmediatamente a Minesotta Timberwolves a cambio de Kevin Love, que sería una pieza clave para el futuro éxito de la franquicia.
En 2014 LeBron volvería al equipo de su ciudad natal para cumplir su promesa y durante los próximos 4 años, los Cavaliers vivirían su apogeo como franquicia llegando a las finales de la NBA todos esos años.
Todas esas finales fueron contra el mismo rival: los Golden State Warriors de Stephen Curry, Klay Thompson y Draymond Green. En 2015, los Cavs fueron derrotados en unas finales marcadas por la lesión de Kyrie Irving. Al año siguiente, los de Ohio, dirigidos por Tyronn Lue, obtendrían su venganza en unas finales de 2016 donde no llegaban como nada favoritos. Los de San Francisco venían de completar el mejor balance en temporada regular de todos los tiempos con 73 victorias y 9 derrotas. Esas finales empezaron con los Warriors, dirigidos por Steve Kerr, adelantándose 3-1 y ya se veían campeones pero, unos Cavaliers liderados por LeBron, darían la vuelta a la serie completando una remontada histórica. En 2017 perderían las finales después de la llegada de Kevin Durant al equipo de la badía y en 2018 volvieron a caer derrotados, en gran parte, culpa de la salida de Kyrie Irving rumbo a los Boston Celtics en verano de 2017.
Al acabar la temporada 2017-18, LeBron James se marchaba a Los Angeles Lakers con su misión cumplida y los Cleveland Cavaliers volvían a verse en el fondo del abismo sin ningún jugador referente. En 2019, 2020 y 2021 no entrarían a los playoffs pero fueron reclutando jugadores universitarios en los ‘drafts’ como Collin Sexton, Darius Garland y Evan Mobley. Estos dos últimos nombrados se convertirían en pilares de los Cavs actuales.
En 2022 Cleveland lograba conseguir una plaza para el ‘play-in’ pero una derrota contra unos Atlanta Hawks liderados por Trae Young no les permitió acceder a la postemporada. En 2023 la directiva decidió dar un golpe a la mesa mandando hasta a 3 jugadores a Utah Jazz a cambio de su estrella Donovan Mitchell. Con esta incorporación el equipo mejoró repentinamente y logró entrar a los playoffs de 2023, donde caerían en primera ronda contra los New York Knicks liderados por Jalen Brunson. En 2024 los Cavaliers volverían a la postemporada pero otra vez tropezarían en primera ronda, esta vez contra los Orlando Magic liderados por Paolo Banchero.
Esta temporada nadie esperaba este rendimiento de los Cavs y sin duda están siendo la sorpresa de la temporada. Están intratables en la conferencia este y poseen el mejor balance de toda la liga. Los Cavaliers han conseguido sentarse en la mesa de los grandes candidatos al anillo con otros equipos como Los Angeles Lakers, Boston Celtics, Oklahoma City Thunder o Denver Nuggets.
Cleveland ha conseguido armar uno de los mejores quintetos de la liga a base de paciencia y confianza en el proyecto. Cuenta con dos exteriores como Darius Garland y Donovan Mitchell, que son dos excelentes anotadores y letales desde la línia de tres. También se encuentran Evan Mobley y Jarret Allen, uno mide 2,11 y el otro 2,06 y son excelentes defensores de la pintura. En el alero se han hecho recientemente con los servicios de DeAndre Hunter, procedente de Atlanta Hawks, es especialista en defensa y un excelente tirador desde el perímetro. Además de tener en el banquillo activos como Isaac Okoro o Max Strus.
A falta de 20 partidos para que acabe la fase regular, los Cavaliers ya están oficialmente clasificados y con una ventaja de 8 victorias sobre los Boston Celtics, el segundo clasificado. Los Cavs ahora quieren demostrar que son un equipo con historia más allá de la etapa de LeBron y para ello, acuden a estos playoffs con hambre y ganas de redimirse.