El Palmer Alma Mediterránea Palma lanza este domingo (12:00) un pulso al favorito al ascenso, el Leche Río Breogán, en un partido en el que aspira dar continuidad a su progresión para demostrar su capacidad de competir contra los mejores. Tras iniciar la segunda fase con una derrota y comprobar el nivel físico de sus nuevos adversarios, los hombres de Pau Tomàs y Álex Pérez quieren dar un paso al frente en un duelo que volverán a disponer del apoyo de Son Moix, donde estará permitida la presencia de 200 aficionados.
La irrupción en la fase de ascenso ante el Leyma Coruña el pasado fin de semana se saldó con derrota y una valiosa lección para el conjunto de Ciutat, que no sólo constató el nivel de la nueva fase del curso sino que confirmó el potencial físico de la élite del grupo A. La semana previa al choque de este mediodía ha permitido al Palmer Palma buscar soluciones tácticas para minimizar las virtudes de sus rivales y, al mismo tiempo, para mentalizarse del nuevo rigor al que se verán sometidos. Sin embargo, si algo caracteriza a los isleños es asumir nuevos desafíos y enfrentarse al líder es precisamente uno de esos retos que alimenta el espíritu competitivo.
Argumentos
La buena noticia para los mallorquines es el regreso de Milan Suskavcevic, que elevará los recursos en la rotación y permitirá que los hombres interiores dispongan de alguna tregua durante el encuentro para emplearse al cien por cien cuando estén sobre el parquet. El pívot montenegrino atravesaba un momento dulce cuando su lesión en el pie izquierdo lo frenó, pero ha podido ejercitarse no normalidad y hoy será una de las armas de Pau Tomàs y Álex Pérez, que tienen al resto de efectivos en plenitud de facultades.
El nivel físico es uno de los aspectos que destaca entre los equipos procedentes del Grupo A, pero sería un error pensar que su peligro se reduce a esta parcela. Basta un simple vistazo a las plantillas para comprobar el potencial de equipos como el propio Coruña o el Breogán. Kevin Larsen, Sollazzo, Seydou Aboubacar o Roope Ahonen dan buena cuenta del nivel del que puede presumir el conjunto lucense y de las amenazas a las que tendrá que hacer frente el Palmer Palma para tratar de engordar su casillero de triunfos.
Entre los jugadores nacionales del Breogán sobresale un viejo conocido de la afición mallorquina como Erik Quintela, que regresa después de haber dejado un gran recuerdo de su paso por la Isla. El base gallego comparte ahora vestuario con su hermano Sergio, que también es uno de los jugadores a tener en cuenta.
En cualquier caso, la propuesta de juego del Breogán no le resultará extraña al equipo de Pau Tomàs y Álex Pérez, ya que en buena medida será como ponerse ante el espejo. «Los equipos a los que nos enfrentamos hacen lo mismo que hacíamos nosotros en nuestro grupo, es decir, defender muy duro, rebotear y correr», analizaba Álex Pérez en la víspera del encuentro.
Público
Otro de los alicientes añadidos al encuentro será la posibilidad de sentir el calor de los aficionados tras más de tres meses de silencio en las gradas. Sólo serán 200 los afortunados que podrán ver de nuevo un partido de la LEB Oro, pero tanto el cuerpo técnico como la propia plantilla del Palmer Alma Mediterránea Palma ya han manifestado su ilusión por hacer vibrar a los suyos en primera persona.
Aunque pelear por el ascenso no era el objetivo marcado por el club a principio de temporada, llegados a este punto el Palmer Palma aspira a trasladar su ilusión y ambición al parquet. Las cuentas dicen que le hacen falta entre cinco y seis victorias y en busca de esta meta da igual el rival que tengas enfrente.