El fortín de Son Moix afronta esta noche (21 horas) la última parada dentro de una segunda vuelta en la que el Iberojet Palma no conoce la derrota ante su hinchada. Siete triunfos consecutivos en el Palau y seis acumulados en las últimas jornadas han disparado las expectativas y el crédito de los hombres de Félix Alonso, que una vez asegurado el playoff tras superar al Barça Lassa B (72-84), quieren hacer suyo el factor pista en el cruce y, de paso, adueñarse de la tercera plaza de la tabla.
Delante tendrán al actual poseedor de esa plaza, un Liberbank Oviedo que siempre se le atraganta a los mallorquines y que defenderá el average fruto del triunfo conseguido en Pumarín (72-66) para aferrarse a su posición y detener la progresión de un Iberojet que firma la segunda mejor dinámica de la LEB Oro (+6, por el +8 del Betis) y quiere poner la guinda a una segunda vuelta inmaculada en el Palau de Son Moix, donde esta temporada han caído el grueso de los equipos inmersos en la pelea por el playoff: Bilbao, Ourense, Melilla, Palencia, Huesca... Y hasta el campeón Betis.
Con la baja segura de un Mikel Motos que regresará a la dinámica del grupo el próximo lunes y la seria duda de Carles Bivià (con una sobrecarga en la pierna derecha), Alonso dispone del resto de su arsenal para encarar un partido trascendental para el desenlace del curso regular, que el Iberojet Palma quiere despedir mejorando el récord ya conseguido de victorias en una misma temporada en la LEB Oro, con las veinte que suma ya el equipo de Alonso, que tiene la opción de igualar o superar las 21 del Menorca (2009/10 y 11/12) y del Drac Inca (2005/06), e incluso las conseguidas en el curso 90/91 por el Prohaci Patronato.
El Oviedo muestra unos númnero parejos a los del Iberojet, con un balance en la segunda vuelta de 11-4, por el 12-3 del Palma. Los asturianos han sabido ganar en canchas como Bilbao o Valladolid, aunque llegarán con su potencial mermado por la baja del base Sergio Llorente (ex del Palma), aunque liderado por el incombustible Oliver Arteaga y con la idea clara de revertir el revés del pasado fin de semana ante el Betis, cerrar definitivamente el factor pista y apartar de su camino a un Iberojet que apela otra vez al factor Son Moix.