El Estadi Balear reabre este domingo (12:00/IB3 Televisió) sus puertas 39 días después para acoger el primer gran reto del año para el Atlético Baleares, que recibe al Rayo Majadahonda con la necesidad de arrancar con buen pie el 2021 para dotar de credibilidad a su objetivo de pujar por el ascenso. El parón navideño y los aplazamientos provocados por ?Filomena? quedan atrás, pero los blanquiazules mantienen las misma urgencias tras su pobre primera vuelta y quieren iniciar el despegue.
El retraso obligado en el regreso al verde condiciona el ritmo competitivo de todos los equipos, aunque también les ha concedido marten para ponerse a punto, acoplar sus refuerzos invernales y en el caso del ATB para hacer borrón y cuenta nueva en el aspecto mental. El revés sufrido en el derbi ante el Poblense hurgó en la herida de los balearicos, que abren la segunda vuelta después de haber consumido buena parte de su margen de error. Y el Rayo Majadahonda no es precisamente un rival propicio, ya que es la referencia del grupo 5A al marchar segundo a un punto del líder, el Sanse, con un partido menos.
Equiparado con el Castilla y el Sanse como máximos goleadores, los problemas del ATB están en su sistema defensivo y en la zona de creación. La llegada de Cordero, que apunta al once en su estreno, debería procurarle más empaque a una sala de máquinas que había dejado dejado muchas lagunas.
La única baja de los blanquiazules, además de la falta de público al disputarse el choque a puerta cerrada, es Pedro Orfila, que se pierde el encuentro por sanción. Las novedades son los fichajes Cordero y Liam Ayad y los otros ?refuerzos? invernales Canario y Alberto Gil tras superar sus lesiones. Una de las principales dudas está en la portería, donde Xavi Ginard se presume como titular.