Tras las vacaciones de verano, muchas empresas y oficinas están planeando la vuelta al trabajo. Puede que la mayoría regresen con las pilas cargadas después de un merecido descanso. Sin embargo, mantener esa energía puede resultar agotador si el entorno no ayuda. Por eso, se debe cuidar la salud emocional y psicológica de los trabajadores. El último informe de InfoJobs sobre Salud Mental y Beneficios Laborales (noviembre, 2021) indica que un 27% de los trabajadores españoles se plantea dejar su puesto de trabajo a lo largo de 2022. Y para ese porcentaje, la principal razón para abandonar su empleo es la salud mental. Especialmente, en el ámbito laboral si esta salud no se cuida puede ocasionar daños colaterales.
Es normal que pasar de un periodo de descanso y ocio a otro que conlleva muchas más responsabilidades y tareas por hacer implica realizar cambios tanto en la manera de comportarnos como en la manera de pensar. Al volver al trabajo es habitual tener que reajustar el horario de sueño o comidas. Esto es lo que ocurre cuando se da el llamado síndrome post-vacacional: la persona se siente desubicada y desilusionada con su presente al guiarse por los parámetros y las rutinas que había estado utilizando durante las vacaciones. Para que la vuelta sea más llevadera, te ofrecemos unos consejos.
En primer lugar, establece una progresión de las tareas según tus prioridades. Es decir, no te abrumes con grandes listas de 'cosas por hacer', hasta que no finalices una actividad pendiente, no pienses en la siguiente. Así será menos probable que el estrés te paralice. Por otro lado, dormir mal disminuirá el rendimiento laboral y empeorará la salud mental, para evitarlo redefine tu horario de sueño. Tampoco olvides tus aficiones, el tiempo libre no lo malgastes pensando en lo que tienes que hacer en el trabajo, reservar ese momento para retomar tus pasatiempos. Una muy buena manera de desconectar y de dejar atrás los pensamientos intrusivos que a veces surgen en el trabajo es a través de la práctica de ejercicio.