Mayo es el mes primaveral por excelencia. Las temperaturas suben y, con ellas, empiezan a estar en su punto algunas de las frutas más esperadas y las estanterías de las fruterías se empiezan a llenar de color.
Comer frutas y verduras de temporada se convierte en algo mucho más apetecible y nos podemos beneficiar más fácilmente de todas ventajas que tiene hacerlo, como una cesta de la compra más barata, menos emisiones y mejor economía de proximidad.
•Aguacate: Mayo es el último mes en el que aguacate está en un punto ideal de maduración en España, y tendremos que esperar al próximo otoño para disfrutar de sus maravillosas propiedades -rico en grasas cardiosaludables, fibra, potasio, vitamina E, carotenos y ácido fólico- sin tener que importarlo.
•Albaricoque: Este pequeña y deliciosa fruta estrena temporada y se quedará con nosotros hasta finales el verano. Tenemos varios meses por delante para disfrutar de su sabor y de sus múltiples propiedades: es muy rico en pro-vitamina, potasio.
•Cereza: Es una de las frutas más esperadas debido a su delicioso sabor, al que es difícil resistirse. Además, su tono intenso rojo delata que es muy rica en flavonoides y polifenoles, importantes antioxidante, así como en vitaminas A y C.
•Frambuesa: Es el momento de despedirse de esta delicada fruta, tan nutritiva como sabrosa como baja en azúcar y rica en antioxidantes.
•Fresa-fresón: La fresa y el fresón siguen estando en su mejor momento, así que sigamos aprovechando sus múltiples antioxidantes, como la vitamina C, así como de su gran cantidad de minerales como hierro, potasio y fósforo.
•Limón: Al limón se le han atribuido decenas de propiedades, desde antisépticas hasta anticancerígenas, pero lo que sí es cierto es que una fruta riquísima en vitamina C y otros antioxidantes y es muy útil como astringente y, aunque parezca contradictorio, antiácido.
•Naranja: Ya queda poco para que la fruta que nos ha acompañado desde los primeros meses del año estén su mejor momento. Su gran cantidad de vitamina C, su fibra y sus flavonoides, tan antioxidantes, nos protegerán todavía unas semanas más.
•Nectarina: Otra deliciosa fruta que llega para quedarse durante todo el verano es la nectarina, una fresca y carnosa fruta muy rica en antioxidantes, fibra y potasio.
•Níspero: Su color anaranjado delata la gran cantidad de betacarotenos que contiene y que le aportan un gran poder antioxidante. Además, es rico en peptina -una de las fibras más saludables- fibra y potasio, por lo que nos ayuda a no retener líquidos. Lástima que este entre nosotros solo durante la primavera.
•Plátano: Gracias al benigno clima de Canarias, podemos disfrutar de los plátanos todo el año. Muy rico en potasio, fibra y magnesio, es una fruta ideal para los niños y se su sabor dulce y suave la convierte en una de las favoritas de los niños.
•Pomelo: Este es el último mes que podemos disfrutar de del peculiar pomelo, que nos abandona hasta el otoño. Como buen cítrico, es muy rico en vitamina C y otros antioxidantes, así como en ácido fólico.
•Acelga: Con grandes cantidades de vitamina C, ácido fólico, vitaminas A, E y B y magnesio se hace indispensable incluir acelgas en la dieta, y más cuando están en su mejor momento.
•Ajo: Este rico condimento no puede faltar en la cocina mediterránea, donde se utiliza en innumerables platos como condimento. Si, además, podemos aprovechar sus múltiples propiedades, como mejorar el sistema inmune o ayudar a regular el colesterol, mucho mejor.
•Alcachofa: De la alcachofa siempre se ha dicho que es depurativa, y nos les falta razón, pues gracias a su gran cantidad de fibra, de potasio y la presencia de cinarina, una sustancia que la función del hígado, esta verdura nos ayuda a eliminar lo que no necesitamos.
•Apio: Rica en magnesio, potasio y fibra, el apio nos ayuda a eliminar líquidos y favorece la digestión. Lástima que sea el último mes en el que podemos disfrutar de estas propiedades hasta después del verano.
•Brócoli: Otra verdura que nos está diciendo adiós hasta épocas más frías es el brócoli, uno de los vegetales a los que más propiedades beneficiosas se le atribuyen, gracias, sobre todo, a la gran cantidad de vitaminas antioxidantes y minerales como el hierro. Además, tiene propiedades depurativas.
•Cebolla: Las propiedades nutricionales e incluso medicinales que se le atribuyen a la cebolla son casi innumerables. Esta fama se la debe sobre todo a sus compuestos azufrado, esos que nos hacen llorar cuando la cortamos y de los que dice que son depurativos y que nos protegen de patógenos.
•Endibia: Amarga, pero exquisita, así es la endibia, a la que se le atribuyen propiedades beneficiosas para el hígado gracias a la intibina, que contiene. Además, es muy rica en ácido fólico, ideal para las embarazadas.
•Espárrago verde: Aún nos quedan dos meses para disfrutar de los espárragos verdes, una verdura muy rica cantidad de ácido fólico y vitaminas A, C, E y K. Además, su suave efecto diurético y laxante le confieren propiedades depurativas.
•Espinaca: Las espinacas son una de las verduras más ricas en hierro y ácido fólico, pero, para aprovechar sus propiedades, es mejor consumirlas crudas, pues pierden muchas propiedades con la cocción. Además, es muy eficaz para combatir el estreñimiento.
•Guisante: Ricos en ácido fólico, vitamina C y hierro, los guisantes tienen lo mejor de las verduras y de las proteínas. De hecho, uno de los aminoácidos esenciales que contienen es lisina, por lo que es ideal para las dietas vegetarianas.
•Haba: Ricas en proteínas, este vegetal a caballo entre las legumbres y las verduras, contiene además una gran cantidad de fibra, vitamina C y ácido fólico. Lástima que solo esté disponible en todo su esplendor hasta principios de verano, aunque después pueden consumirse como una legumbre convencional.
•Judía verde: Las podemos encontrar durante todo el año gracias a los invernaderos, pero es a partir de mayo cuando están en todo su esplendor porque nos llegan directamente de la huerta. Sus propiedades son muchas, sobre todo por la gran cantidad de vitaminas distintas que contiene, como C, A, grupo B…
•Lechuga: Al igual que las judías, las tenemos disponibles todo el año, pero en su caso sin necesidad de invernaderos, gracias a la enorme variedad de lechugas que existen. Versátil y fresca, aunque no tenga mucho sabor, sí contiene mútipes propiedades, como ayudarnos a eliminar líquidos gracias a su gran cantidad de agua y potasio.
•Patata: La universal patata también está en su mejor momento, desde ahora hasta bien entrado el otoño. Además de su versatilidad y su delicioso sabor, la patata, siempre que no la friamos, puede llegar a ser muy sana gracias a su gran cantidad de vitaminas del grupo B y, cocidas pueden ayudar incluso a regular niveles los niveles de azúcar en sangre y es muy eficaz para combatir la acidez.
•Remolacha: La remolacha morada, no la azucarera, tiene muy poca cantidad de azúcar. Lo que sí posee en abundancia es fibra, varias vitaminas del grupo B, fósforo, hierro y yodo.
•Zanahoria: El color naranja de la zanahoria delata la gran cantidad de betacarotenos que contiene, un antioxidante que es un gran aliado de la vista y de la salud de la piel y las mucosas. Además, es muy suave y digestiva y está recomendada en cualquier tipo de dieta.