Un hervido básico de patata, zanahoria, col, judías verdes y pollo nos regalará un caldo base con el que preparar un reconfortante potaje de garbanzos al que añadiremos calabacín.
Ingredientes para 4 personas
- 1l de caldo de hervido
- 400g de garbanzos cocidos
- 1 calabacín
- 1 cebolla
- 1 zanahoria
- 2 huevos duros
- 1 hoja de laurel
- Tomillo
- Sal
Para prepararlo, empezaremos eliminar los extremos de un calabacín, el cual cortaremos primero en cuatro cuartos y luego en rodajas de unos tres milímetros. Espolvoreamos con sal y dejamos en un colador para que suelten el agua amarga. Pelamos y picamos una cebolla, la cual sofreiremos en una cazuela con una cucharada de generosa aceite de oliva virgen extra. Mientras se pocha, pelamos una zanahoria, la cortamos primero por la mitad y luego a rodajitas finas. La agregamos a la cebolla junto al calabacín, que habremos enjuagado y escurrido bien. Añadimos 400g de garbanzos cocidos, una hoja de laurel, tomillo, sal y 1 litro de caldo del hervido.
Dejamos cocer a fuego lento durante una hora aproximadamente, tiempo en el cual preparamos un huevo duro por cada dos comensales.
Pasado ese tiempo y con los huevos ya pelados, ya podremos servir la escudella, que acompañaremos por medio huevo duro por persona.