La Policía Nacional ha lanzado una importante recomendación a través de sus redes sociales destinada especialmente a padres y tutores que acuden con menores a espacios concurridos. Mediante un vídeo informativo, las autoridades policiales comparten un sencillo pero eficaz consejo que puede resultar crucial en caso de extravío de un menor. Este método busca optimizar los tiempos de búsqueda y mejorar la coordinación entre los agentes durante las operaciones de localización.
En el vídeo difundido, un agente explica detalladamente la técnica preventiva que consiste en fotografiar al menor con la indumentaria que llevará puesta antes de acudir a lugares como playas, centros comerciales, parques de atracciones o cualquier espacio con aglomeraciones. «Apunta esta idea por si tu hijo menor de edad se pierde. Cuando vayas a algún lugar frecuentado como una piscina, playas, centro comercial o parque o simplemente estés de vacaciones y vayas a acudir a un sitio con gran concentración de gente, ten en cuenta esto. Si antes de salir de casa haces una fotografía al menor con la ropa con la que vaya a salir a la calle o con el traje de baño esto nos ayudará mucho», señala el agente en el vídeo compartido.
Según detalla el representante policial, esta simple acción permite a los cuerpos de seguridad contar con información visual actualizada y precisa que agiliza notablemente el proceso de búsqueda. «Con este simple gesto de enseñarnos la foto del móvil harás que la búsqueda policial sea mucho más precisa porque sabremos exactamente a quién estamos buscando. Eficaz a la hora de localizarlo y práctico, porque lo distribuiremos a todos los agentes que estén en la calle», añade en su explicación.
Esta iniciativa se enmarca dentro de las campañas de concienciación que la Policía Nacional desarrolla periódicamente para mejorar la seguridad ciudadana. Durante los meses de verano de 2025, con el aumento de desplazamientos familiares a zonas turísticas y espacios de ocio, las autoridades han intensificado sus recomendaciones dirigidas específicamente a la protección de los más pequeños. Los expertos en seguridad infantil consideran que las medidas preventivas son fundamentales para reducir las situaciones de riesgo. En España, según datos oficiales, cada año se registran miles de casos de menores extraviados temporalmente en espacios públicos concurridos, siendo los meses estivales cuando se produce un incremento significativo de estas incidencias.
La inmediatez en la actuación resulta clave en estos casos. Disponer de una imagen actualizada del menor con la ropa que lleva en ese momento permite a los agentes optimizar los recursos disponibles y coordinarse de manera más eficiente. Este método, además, elimina las posibles imprecisiones en las descripciones verbales que suelen darse en situaciones de estrés. Cuando se produce la desaparición de un menor, la Policía Nacional activa inmediatamente un protocolo específico que incluye el despliegue de agentes en la zona, la delimitación del perímetro de búsqueda y la recopilación de información relevante. En este contexto, contar con una fotografía reciente y que muestre exactamente la indumentaria que lleva el niño o la niña en ese momento supone una ventaja operativa considerable.
Este tipo de protocolos han ido evolucionando con el tiempo, incorporando nuevas tecnologías y metodologías. Las fuerzas de seguridad españolas han mejorado notablemente sus procedimientos para localizar a menores extraviados, reduciendo significativamente los tiempos medios de resolución de estos casos. La colaboración ciudadana juega también un papel fundamental en estas situaciones. Por ello, las campañas informativas como la difundida recientemente por la Policía Nacional buscan no solo proporcionar consejos útiles, sino también concienciar sobre la importancia de la prevención y la actuación coordinada.
Además de la fotografía preventiva, los especialistas en seguridad infantil recomiendan implementar otras estrategias complementarias para minimizar los riesgos de extravío. Entre ellas destacan: establecer un punto de encuentro claro y fácilmente identificable por el menor en caso de separación; proporcionar al niño una identificación con datos de contacto, especialmente en eventos multitudinarios; explicar previamente al menor cómo debe actuar si se pierde, indicándole que debe buscar a un policía, vigilante de seguridad o dependiente de establecimiento; utilizar pulseras identificativas en niños pequeños, especialmente en playas y parques de atracciones; mantener siempre contacto visual con los menores y establecer puntos de control periódicos.
En caso de que, a pesar de las precauciones, se produzca la desaparición de un menor, los expertos recomiendan mantener la calma y seguir un protocolo básico de actuación:
1. Permanecer en el último lugar donde se vio al menor, ya que es posible que regrese allí.
2. Notificar inmediatamente al personal de seguridad del establecimiento o recinto.
3. Contactar con la Policía Nacional o cuerpo de seguridad correspondiente, aportando toda la información disponible, incluida la fotografía previamente tomada.
4. Distribuir la búsqueda con otros acompañantes adultos, estableciendo zonas específicas para cada uno.
5. Utilizar, si es posible, los sistemas de megafonía del establecimiento para emitir mensajes de búsqueda.
La iniciativa de la Policía Nacional ha sido ampliamente elogiada por asociaciones de protección a la infancia y expertos en seguridad, quienes destacan la simplicidad y efectividad de la medida propuesta. En un contexto donde la prevención resulta fundamental, este tipo de consejos prácticos pueden marcar una diferencia significativa en situaciones de emergencia.