En un momento en que los precios de la gasolina continúan ascendiendo, los conductores están buscando constantemente formas de ahorrar en combustible. Y aquí traemos una. ¿Sabías que con una técnica simple de ventilación podemos contribuir significativamente a nuestra economía? Si quieres saber cómo debes hacerlo, aquí te lo contamos.
Ventilación y temperatura: Factores clave
Uno de los factores que más afecta el consumo de carburante es el uso del aire acondicionado. En días calurosos, este sistema de ventilación puede aumentar el consumo de gasolina en hasta un 20 %. Sin embargo, hay una forma de minimizar este impacto: ventilar el vehículo antes de encender el aire acondicionado.
Al aparcar el coche bajo el sol, la temperatura interior aumenta drásticamente bastantes grados. Al entrar al vehículo y encender inmediatamente el aire acondicionado, este tiene que trabajar más para enfriar el interior, consumiendo más gasolina. Lo que se debe hacer antes de encenderlo, es abrir las ventanas durante unos minutos para liberar el aire caliente acumulado. Una vez que la temperatura interior ha disminuido, se pueden cerrar y encender el aire. Esto permitirá que el sistema trabaje de manera más eficiente, consumiendo menos combustible.
Además de suponer un ahorro en gasolina, ventilar el vehículo también tiene beneficios para la salud de los pasajeros. El aire caliente acumulado en un coche estacionado puede contener niveles más altos de contaminantes y toxinas. Si abrimos las ventanas ayudará a mejorar la calidad de éste creando un ambiente más saludable para los ocupantes. En la época actual donde tanto la sostenibilidad como la economía doméstica son cruciales en nuestra vida diaria, adoptar prácticas de conducción inteligentes es esencial. El truco que os hemos enseñado es una técnica simple pero efectiva, además de un pequeño cambio que tiene un gran impacto tanto a nivel económico como ambiental.