Las zapatillas se han convertido en un básico del día a día: un tipo de calzado muy cómodo perfecto para hacer frente a toda la jornada sin que los pies sufran. Eso sí, cada zapatilla tiene unas características propias y es muy importante diferenciar los modelos para escoger el más práctico para cada caso, tal y como se explica en el vídeo que acompaña a esta información.
Este tipo de calzado se empezó a elaborar a finales del siglo XVIII, cuando los fabricantes de caucho utilizaban los excesos de producto de las ruedas para fabricar otros elementos. Uno de ellos eran las zapatillas, en aquel entonces formadas por una suela de goma y con lona en la parte superior, tal y como indica el portal El Altier.
Las zapatillas fueron evolucionando hasta que en 1916 se comercializaron de forma masiva las Keds y solo un año después Marquis Converse sacó al mercado las populares deportivas con su nombre. A partir de los año 90 este calzado se puso de moda y dejó de utilizarse únicamente para hacer deporte.
Karl Lagerfeld fue uno de los responsables del salto de las zapatillas a la calle: al frente de Chanel las fue incorporando a las pasarelas. Esta idea funcionó tan bien que hoy en día la zapatillas no faltan en las colecciones de Alta Costura y, como consecuencia, en nuestro día a día.