Joaquin Pourque (Francia, 1970) es un artesano que ha creado en Sóller una pequeña empresa para la fabricación de jabones naturales, perfumes y otros productos de higiene corporal. Francés de nacimiento, Pourque está muy integrado en Sóller, donde es parte activa de la asociación de franceses descendientes de sollerics. Todos los sábados acude al mercadillo artesano para ofrecer sus productos, una de sus vías de comercialización.
«Después de trabajar en varios oficios, incluida la dirección de un hotel, nos trasladamos a Sóller, ya que la familia de mi mujer era del Valle y recibimos una casa en herencia». Se trata de una finca con un huerto de naranjos de unos 2.500 metros cuadrados que había que gestionar. «Nos planteamos un cambio de vida y vimos que había un vacío en lo que se refiere a productos naturales para la higiene personal, elaborados de forma absolutamente artesanal y con materia prima de kilómetro cero en sentido estricto: los jabones», explica Pourque.
Ya con este objetivo, Joaquin se puso manos a la obra y obtuvo la Carta de Artesano y del Consell y también el certificado de destilador de esencias. «La idea era crear un producto totalmente local aprovechando lo que ya teníamos aquí, como los cítricos de nuestro huerto y el aceite de oliva virgen, que es lo que llevan nuestros jabones, ya que aunque en su elaboración interviene la sosa, sustancia que ya no se encuentra en el producto final. Los aromas son de esencias naturales de plantas o frutos de la Serra y los colores de las pastillas se obtienen a partir de arcillas», asegura.
Sus productos incluyen no solamente las pastillas de jabón para las manos y el cuerpo, sino también jabón para el cabello (champú). «Descarto la fabricación de jabones líquidos porque no queremos contribuir a aportar más plástico al mercado. Una botella de gel lleva básicamente el plástico del envase, jabón y agua, pero también conservantes, porque al haber líquido son necesarios».
Además, apunta que «muchos jóvenes están volviendo a la utilización de las pastillas incluso para el pelo y los prefieren a los geles y jabones líquidos». Llevan también el distintivo de la Serra de Tramuntana, concedido por el Consorcio al exclusivo origen de las materias primas. Admite que el turismo respetuoso con el medio ambiente es quien más valora este tipo de producto local: «sin el turismo la agricultura tradicional mallorquina y este tipo de manufactura artesanal derivada ya no existirían».
Todo el proceso es manual, ya que «son muchas horas al día, ya que también hay que cuidar la finca o ir a la cooperativa, de la que somos socios». Bajo petición, Pourqué también fabrica otras marcas para fincas y agroturismos que quieren «jabón elaborado con su propio aceite», mientras que sus productos se exportan a Alemania a través de Fet a Sóller.