Jordi Évole puso cara este domingo al milmillonario José Elías. Un empresario catalán que sorprendió hace unas semanas al entrar en la lista Forbes de los 100 españoles más ricos. Sin embargo, a pesar de su gran fortuna, hasta ahora, era una personas totalmente desconocida. Tan solo, había trascendido un dato sobre su vida y sus negocios: avaló la candidatura de Joan Laporta para volver a presidir el F.C. Barcelona. Elías, conocido como «un rico con mentalidad de pobre», apareció por primera vez en televisión este domingo en 'Lo de Évole'.
«Me preocupa perder el anonimato porque tengo la paranoia con la seguridad», confesó durante la entrevista. Sin embargo, a pesar del temor, no dudo en mostrar durante el programa su enorme mansión o pasear por el cielo de Barcelona en compañía de Évole en su propio helicóptero. «He intentado, muchas veces, hablar con los ricos de España. He pedido entrevistar a Amancio Ortega, a Juan Roig, Sol Daurella... pero siempre me han dicho que no», le aseguró el periodista.
«Si quiero sacar algo de esto es que la gente tenga un espejo de esperanza. Me gustaría que salieran muchos más con un cierto éxito en la vida y que ayudara a que el vecino viviera un poco mejor», aseguró Elías. Sin embargo, el presentador le recordó una frase de Julio Anguita: «No conozco a nadie que trabajando honradamente se haya hecho rico». El invitado de Lo de Évole no dudó en defenderse: «Yo he intentado siempre hacer negocios para luego dormir por las noches». Y añadió: «En este país cuando algo va bien o eres narcotraficante o trata de blancas».
Mientras disfrutaban de una comida de lujo, la charla se relajó hasta tal punto que una pregunta del millonario puso entre las cuerdas a Évole. «A un ingeniero en la facultad le enseñan a hacer cálculos, pero a un periodista, ¿qué le enseñan?», le dijo. «Hostia tío, nunca nadie había sido tan faltón», es lo único que pudo contestar el periodista catalán.
¿El dinero da la felicidad?
«El dinero no da la felicidad, pero te quita preocupaciones», afirma tajante José Elías. «Hay cosas que sí que puedes comprar con dinero que te facilitan la vida», confiesa sincero el empresario haciendo referencia a cosas materiales como casa, un coche o un viaje. «Esa es la felicidad que te da el dinero y luego, la otra felicidad es mucho más intensa. La felicidad de estar con tu pareja, con tus amigos o con tus hijos. Para esa, no te hace falta dinero», detalla Elías.
A pesar de tener una de las fortunas más grandes del país, gracias a empresas de electricidad, telecomunicaciones y hasta de congelados, el invitado de Évole no dudaría en «volver atrás, a mis ochos años, cuando veía a mi padre y a mi madre». Sus padres fallecieron cuando tenía solo 23 años. «Siento pena cuando veo todo lo que he logrado porque mi padre y mi madre no lo han visto. Claro que conocieron una parte de mí pero no vieron la evolución y eso me genera rabia e impotencia», aseguró.