El clásico de animación «Los Picapiedra» cumplió hoy 50 años de su debut en la pequeña pantalla de EE.UU. donde fue el primer programa de dibujos pensado para entretener tanto a un público infantil como a la audiencia adulta.
El estreno de «Los Picapiedra» tuvo lugar el 30 de septiembre de 1960 en la cadena ABC y sentó las bases de lo que sería un argumento habitual de la serie: Fred (Pedro) y Barney (Pablo) se inventaban una excusa ante sus esposas Wilma y Betty para poder ir a la bolera.
Aunque estaba ambientado en la Edad de Piedra, el programa trató de ser una parodia de la vida de las familias de clase media en EE.UU. durante la década de los 60, un formato que tuvo mucho éxito y que heredó posteriormente «Los Simpsons».
«Los Picapiedra» fue la telecomedia de animación con un mayor número de emisiones en horario de máxima audiencia durante gran parte del siglo XX en EE.UU., un récord que reclamó para sí «Los Simpsons» en 1997.
Tres años después de su nacimiento, la serie adoptó por primera vez la sintonía de cabecera que se convertiría en su seña de identidad, «Meet the Flintstones».
Al igual que ha ocurrido con «Los Simpsons», muchos famosos de la época tuvieron su personaje en «Los Picapiedra», como Gina Lollobrigida, que apareció como asistenta italiana de Fred y Wilma en 1963 bajo el nombre de Lollobrickida o el actor Tony Curtis, fallecido hoy.
Curtis puso su voz a la estrella de cine Stony Curtis de Hollyrock, adaptación de Hollywood al universo prehistórico, que estaba en la ciudad de Bedrock para rodar su próxima película.
El impacto de «Los Picapiedra» en la cultura popular hizo que en 1994 los estudios de Hollywood apostaran por llevar a la gran pantalla a los personajes de William Hanna y Joseph Barbera en una producción homónima protagonizada por John Guodman y Rick Moranis y que recaudó más de 300 millones de dólares en todo el mundo.
En 2000 hubo una segunda entrega, «Los Picapiedra en Viva Rock Vegas», con otros actores pero bajo la misma dirección, de Brian Levant, que tuvo poca repercusión.