Gran sorpresa para los asistentes al concierto de Madonna la noche de este jueves en el Palau Sant Jordi de Barcelona. Úrsula Corberó se subió al escenario con la cantante y ambas hicieron una performace musical al ritmo de la canción Vogue. La española asistió al concierto junto a su novio, Chino Darín, y su amiga, la diseñadora Miranda Makaroff. En un momento dado se subió al escenario e hizo la coreografía con la americana, un baile en el que las dos llevaban carteles e interactuaban con los bailarines. La amistad entre las dos no es un secreto, ya que la propia actriz explicó a Jimmy Fallon cómo fue el día en el que conoció a la reina del pop.
Corberó recordó que se vieron por primera vez durante un viaje. «Estaba en Los Ángeles y viajaba de vuelta en Madrid. Tenía que hacer escala en Londres y, después de ir al baño, me encontré con Madonna en el avión»». La sorpresa llegó cuando la estadounidense se le acercó y le confesó que le encantaba La casa de papel: «Hola, solo quería decirte que soy super fan de ti. Soy muy fan de la serie y Tokio es mi personaje favorito». La actriz se quedó sin palabras y Madonna, al ver su cara, le preguntó si sabía quién era. «Claro que sé quién eres, eres la jodida Madonna», le respondió.
Tan bien fue el encuentro que la cantante incluso le pidió que le apuntara su número de teléfono. Pero la cosa no quedó ahí, ya que tras bajar del avión la joven recibió un mensaje de la artista en el que le avisaba de que se había dejado el pasaporte en su asiento. «Pude volver a casa gracias a Madonna», desveló ante los aplausos del público. Aunque han pasado dos años desde que Úrsula recordó esta anécdota, el momentazo que ambas protagonizaron sobre el escenario en el Palau Sant Jordi demuestra que todavía mantienen el contacto.
Con esta gira Madonna celebra sus 40 años de carrera con un deslumbrante espectáculo repleto de éxitos. «El mero hecho de estar vivos es un privilegio», reconocía la cantante, que el pasado verano anuló el tramo americano de sus conciertos por una grave infección bacteriana que la llevó a la UCI. Sólo cuatro meses después, vuelve a estar sobre los escenarios. Aunque las coreografías de esta gira no son tan exigentes para la diva como en otros tiempos, la norteamericana sigue marcando estilo.