Este domingo, Isa Pantoja cumplió 25 años dentro de La casa fuerte. Tras su accidentada entrada en el reality con ataque de ansiedad incluido por enterarse de la entrevista que dio su hermano en una revista, la hija de Isabel Pantoja afronta su concurso con la cabeza más fuera que nunca a causa de los problemas entre Kiko Rivera y la tonadillera.
Para felicitarla y poder tranquilizarla tras lo vivido el pasado jueves, el DJ entró por teléfono al concurso y le dio todos sus ánimos y besos, de él y de parte de toda su familia: «Quiero decirte felicidades. Decirte que se me partió el alma. No quiero verte llorar, quiero verte disfrutar y que no pienses en nada del exterior [...] Te pido perdón públicamente si alguna vez te he fallado. Siempre serás la niña de mis ojos, y te quiero con el alma».
Pero también soltó algún detalle de este desencuentro familiar que viven y dejó entrever que sus problemas tienen fácil solución: «Estoy hecho polvo pero la vida sigue. Sí que es difícil que esto coja buen camino, pero no es imposible. Yo lo estoy pasando muy mal y además si fuera por mí yo lo paraba en el momento de ya. Sé que esto va a seguir por parte de mamá. Tengo que luchar, ya no por la herencia, me da igual, sino porque me haya metido en un marrón sin saberlo».
«Es tan fácil como coger el teléfono y decir 'Esto pasó así y lo tuve que hacer así'. No te entretengas en llamar echando la culpa a mi mujer, mamá [...] Yo lo que quiero es a mi madre, no a Isabel Pantoja. Isabel para los fans, para mí es mi madre», añadió. También quiso aclarar que no quería poner a su hermana en contra de su madre, sino que le pedía que estuviera al lado de ella en estos momentos.
Por ello, Isa Pantoja también quiso mandarle un mensaje a la tonadillera: «Yo sé cómo tiene que estar y ahora por mucho que yo le diga estará destrozada. Que se tome tiempo, sin escuchar a nadie y y llegará el día en el que se sienta a gusto para llamar».