El ex tenista Carlos Moyà fue el encargado ayer por la tarde de pulsar en el Ajuntament de Palma el botón del encendido navideño, unas luces que por primera vez abandonan la iluminación tradicional y estrena microlámparas de bajo consumo (LED).
Con su hija Carla en brazos, de cuatro meses de edad, y acompañado por su pareja Carolina Cerezuela, tres sobrinos (Marcos, Pablo y Blanca); Aina Calvo, alcaldesa de Palma, y miembros de la Corporación, Moyà 'iluminó' las luces de Navidad de 102 calles, plazas y avenidas de Palma, ubicadas en las casi 70 barriadas.
«Es un honor que hayan pensado en mí para encender las luces. Es un acto simbólico muy importante», afirmó el ex tenista. Minutos antes, la alcaldesa les entrego en el interior del Ajuntament una réplica de una escultura de Pep Llambías.
Tras el encendido navideño, Moyà no paró de firmar autógrafos durante un cuarto de hora y de posar junto a sus aficionados. Dentro del Ajuntament, esperaban Carolina con su hija y miembros del Consistorio.
El acto estuvo ambientado por la Banda de Música Municipal de Palma, que interpretó dos obras populares ('Jora marinera' y 'Russian Gipsy song'), una de ABBA ('Mamma Mia', Bourgeois ('Felanitx Fantasy') y Badlet ('Pirates del Carib').
La Plaça de Cort casi se llenó durante una hora y cientos de personas degustaron su vaso de café caliente con ensaimada, servido por la empresa Menins. En total fueron 1.800 unidades, que se terminaron en poco más de una hora.
Respecto a las luces, este año, el Ajuntament ha completado la sustitución de la totalidad de los puntos de luz incandescentes, que componía un 70 por ciento de la iluminación navideña, lo que permitirá un ahorro del 85 por ciento de potencia.
Además, siete puntos de Palma estrenan nueva decoración: la Plaça de la Reina cambia los arcos de lámpara incandescente por estrellas; la Plaça Major y Joan Carles I estrenan carpas nuevas de guirnaldas de microlámparas; es Born luce este año guirnaldas de bajo consumo en sus árboles; la calle Fábrica incorpora por primera vez adornos en báculos y farolas, y la Plaça Nova de Flassaders y la calle de l'Hostal de Santanyí cuentan con sendas carpas de microlámparas e hilos luminosos.
El encendido se realizó en una tarde fría, pero sin lluvia. La iluminación navideña permanecerá encendida hasta e 7 de enero. Respecto a los horarios, el encendido siempre tendrá lugar a las 17.30 horas. De domingo a jueves se apagarán las luces a las 21.30; viernes y sábados, a las 24.00 horas; los días 24 y 31 de diciembre, a las 6.00 de la madrugada y el 25 de diciembre, a las 3.00.
Las luces volverán a iluminar Palma en la revetla y el día de Sant Antoni, y en la revetla y festividad de Sant Sebastià. El Ajuntament de Palma ha invertido este año 250.000 euros, frente a los 400.000 del año pasado.
En la plaza de la Iglesia de es Coll d'en Rabassa se procedió a partir de las 19.30 horas al estreno de su iluminación, con pequeñas bolas navideñas. Allí se repartieron 1.200 vasos de chocolate caliente.