Guillermo Gil, uno de los pocos exponentes que quedan en la Isla de la Mallorca costumbrista, protagonizó la exposición colectiva que la Fundació Barceló inauguró adelantándose a la Nit de l'Art.
Los paisajes de Gil provocan emociones pues plasman la atmósfera de Mallorca, su luz, transparencias y colores.
Esta exposición rinde homenaje a toda una vida dedicada a la pintura. Como indica el título de la exposición Gil y amigos, el artista octogenario estuvo arropado por artistas que fueron discípulos y hoy amigos, como Joan Vich, Juan Manuel Pastor y José Luis Godoy, que presentaron magnífica obra.