La noche del pasado 9 de agosto un nutrido grupo de buenos amigos se reunieron en un conocido local del Secar de la Real para celebrar sus más de cuarenta años de amistad.
Su relación comenzó en los años setenta en la barriada palmesana de Blanquerna y en ambientes diferentes de la misma zona, como la parroquia de Santa Payesa y el familiar y mítico Bar 2 Perellons, desaparecido hace ya décadas pero aún presente en la memoria de estos viejos amigos.