De joven promesa, Georgina Gamundí ha pasado, en un lapso de tiempo muy breve, a ser una artista consolidada con una propuesta artística firme y de una gran calidad.
Sus últimas piezas pueden contemplarse en la galería Dionís Bennàssar de Pollença desde el pasado sábado, fecha en que tuvo lugar la inauguración con gran éxito de público. Sus creaciones abarcan tanto la escultura como el dibujo y la pintura, casi siempre con la figura femenina como centro, pero desde una visión muy personal y profunda.