Espectacular resultó la presentación en sociedad del restaurante Port Blanc en Marina Port Vell, de Palma. En sus 800 metros cuadrados y tres niveles, los cerca de trescientos invitados lucieron sus mejores galas. Desde el bar y las terrazas, los asistentes pudieron disfrutar de la puesta de sol ante la bahía.
En la zona de bar del piso superior se disfrutan amplias vistas a Bellver, el Paseo Marítimo y el mar abierto. Mientras tanto, las modelos lucían, en la terraza, prendas de la tienda del complejo de Port Blanc. El bar y el restaurante ofrecieron una combinación culinaria internacional marina en un ambiente marinero donde la decoración es un acierto. Los propietarios, Jörn y Katerina Meyer, ejercieron de perfectos anfitriones en un espectacular local de ocio atracado en un elegante puerto de yates.