La Fundació Deixalles inauguró el pasado martes su segunda tienda en Palma, concretamente en la calle Arxiduc Lluís Salvador.
En un local más amplio que el de la calle Blanquerna se pudieron ver los nuevos diseños que surgen de los talleres de inserción sociolaboral que funcionan en Inca y Palma, en los que entran objetos y ropa que muchos desechan, por inservibles o por cansancio, y que ellos reparan o convierten en piezas únicas, como las sillas cordadas con tela de camiseta, cortinas, cojines de tela vaquera, unos originales banquitos hechos con tambores de lavadora o unas faldas a partir de simples sudaderas.