Esta semana ha tenido lugar uno de los acontecimientos más importantes para los estadounidenses. No nos referimos a las elecciones presidenciales sino al esperado desfile de Victoria's Secret, una archiconocida marca de lencería norteamericana.
Por fin este miércoles por la noche, los provocativos angelitos de Victoria's Secret desplegaron sus pícaras alas sobre la pasarela más ardiente del año celebrada en Nueva York.
Muchas de las tops más cotizadas de los últimos años pasearon en ropa interior mostrando las últimas creaciones de la firma.
Pero la gala tuvo otros atractivos, como la actuación del cantante canadiense Justin Bieber, del norteamericano Bruno Mars y de la caribeña Rihanna, que lució durante su intervención tan sexy o más que las cotizadas modelos.