El espectáculo y el arte se han unido muy a menudo dando como resultado un maridaje único, como ocurrió ayer en el Valle de los naranjos, donde las bailarinas del Lido acudieron para realizar una visita al museo Can Prunera. La combinación de los jardines e interiores modernistas y los espectaculares trajes de plumas de las bailarinas del cabaret ofrecieron una imagen espectacular, ante la que algunos de los visitantes al museo quedaron realmente sorprendidos.
Ninguno de los directivos de la junta directiva de la Asociación Tren de l'Art y de Can Prunera quisieron perder la oportunidad de inmortalizar la estampa junto a las espectaculares «vedetes», que acudieron escoltadas por el dueño de Son Amar, Andreu Gelabert, y la responsable de promoción y eventos, Denise Daraud de Deban.
Después de la visita al museo, las bailarinas pudieron visitar Sóller y comprar algunos recuerdos típicos de la Isla. La excursión terminó con un almuerzo en el restaurante Mar i Sol del Port de Sóller.
Arte y espectáculo en Can Prunera
M. Joy | Sóller |