Si hay una mujer guapa, luchadora y buena gente esta es mi amiga Mónica Mateu, una mujer maravillosa que siempre ha salido airosa de las pruebas que la vida ha ido marcándole. Es una señora con sonrisa de gran señora. Hace poco ha pasado por una situación complicada de salud de la que va saliendo con muy buenas noticias, así que su hermana Cristina Mateu y su íntima Isabel Hernández decidieron organizarle una fiesta sorpresa para su cumpleaños.
Eligieron para la cena un lugar que a todos les encanta, Ses Coves de Gènova, ya que Fofo Robledo es amigo de la pandilla, además de buen anfitrión. Invitados los amigos más íntimos y la familia de la celebrante, que en ningún momento sospechó nada. Supuestamente era una cena para tres en Ses Coves. Pues bien, al llegar y llevarse la gran sorpresa cargada de emoción, lágrimas y abrazos y el tsunami de cariño que todos le brindaron, Mónica se encontró con una decoración floral preciosa hecha por Alicia Perrotte, que acompañó una cena deliciosa en la que no faltó la tradicional sangría para acompañar el pa amb oli, homenaje al verano que nos acoge prematuramente.
Mónica se emocionó muchísimo, ya se lo he contado, pero lo más importante es que con música y baile, amigos y familia Mónica Mateu, la gran rubia, celebró la vida. Con salud, que es lo más importante. Te quiero mucho, Mónica, y te admiro más.