Noviembre, a falta de tres días para cerrar el mes, ha registrado el mayor número de víctimas mortales en accidentes de tráfico en lo que llevamos de año en Baleares: un total de 8. Desde el pasado día 1 de enero de 2024 hasta el pasado lunes, día 25 de noviembre, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), el número de muertos en las carreteras y zonas urbanas asciende a 46. El desglose de los fallecidos es el siguiente: 14 motoristas, 1 ciclomotorista, 6 peatones y 3 ciclistas. De los accidentes mortales en vehículos, 15 eran conductores y 7 pasajeros.
En el cómputo general anual, el número de muertos respecto al mismo periodo del año anterior es ligeramente inferior. En 2023, en estas fechas se cerró con 51 muertos frente a los 46 del 2025. Como nota estadística, de los 46 exitus un total de 33 eran hombres y 13 mujeres. Del mismo modo, 34 eran españoles, 6 extranjeros no comunitarios y otros 6, extranjeros pertenecientes a países integrados en la Unión Europea. Un dato importante a tener en cuenta es que había 10 fallecidos que no llevaban puesto el cinturón de seguridad o casco cuando tuvieron el siniestro mortal.
Para contextualizar de forma correcta esta información hay que señalar que el último accidente ocurrido en la noche del sábado en Maó (Menorca) y en el que seis personas perdieron la vida, entre ellas cuatro menores, y que todos ellos circulaban sin cinturón de seguridad, ha hecho aumentar de forma considerable algunas de la variables que recoge la DGT en su informe de siniestralidad.
A pesar de que en número de accidentes es infinitamente superior en zonas urbanas la gravedad de los accidentes es inferior que los que producidos en carreteras. De esta forma, de los 43 fallecidos de los 46 muertos, 7 fueron en casco urbano y 39 en carretera.