Un juzgado de lo Penal de Palma condenó este viernes a una mujer al pago de una multa de 1.350 euros por el atropello de un trabajador en el aparcamiento de un centro comercial de la capital balear. La procesada, que se declaró culpable de un delito de lesiones por imprudencia grave, no podrá conducir vehículos a motor durante los próximos quince meses.
El seguro ha indemnizado al perjudicado, asistido por el letrado Carlos Patón, en más de 400.000 euros debido a las graves lesiones y secuelas que sufrió. La Fiscalía solicitaba inicialmente para la enjuiciada, defendida por Mateo Cañellas, cinco meses de cárcel.
Los hechos tuvieron lugar el 7 de julio de 2022 sobre las 9.30 euros. La mujer conducía su vehículo y se dirigía al aparcamiento del centro comercial. Al llegar a la rampa, y en la zona donde se bifurca el acceso al parking y el de mercancías, se equivocó y se dirigía a este segundo lugar. Al intentar frenar, aceleró por equivocación y perdió el control del vehículo. Impactó contra la barrera, la atravesó y acabó arrollando a un trabajador que se encontraba allí subido a una máquina barredora.
Como consecuencia del impacto, el varón cayó al suelo y la conductora terminó empotrándose contra la pared, que derribó. La víctima sufrió heridas muy graves, que le obligaron a pasar varias veces por el quirófano y, tras más de un año para recibir el alta médica, le han quedado importantes secuelas. El seguro le abonó más de 400.000 euros a modo de indemnización.
La magistrada, dada la conformidad alcanzada entre la defensa con la acusación particular, la Fiscalía y el seguro, dictó sentencia en el mismo acto.