Un hombre aceptó este miércoles una condena de tres años de prisión y una multa de 3.100 euros por un delito de tráfico de drogas en la Isla. El acusado se enfrentaba inicialmente a una petición fiscal de cuatro años y medio de cárcel, pero tras un acuerdo con la defensa en la vista previa que tuvo lugar en la Audiencia Provincial de Palma, se le rebajó la pena.
Su arresto se produjo en marzo de 2020 cuando el hombre, que iba conduciendo su coche, fue interceptado por una patrulla de la Guardia Civil al dictarse una orden de detención, dado que había sido denunciado por un delito de violencia de género.
Fue cuando los agentes registraron el vehículo, cuando encontraron una mochila con diversas cantidades de cocaína y cannabis, dos básculas de precisión, tres quemadores de gas, un kit de utensilios para el consumo de dichas sustancias y un cuaderno.
Una vez trasladado a las dependencias policiales, el acusado autorizó la entrada y registro de su domicilio, en el que se encontró una bolsa con numerosas bolsitas de autocierre y más cannabis. El valor total de los estupefacientes, destinados a su venta, tenía un valor ilícito en el mercado de aproximadamente 3.100 euros.