Los compañeros de trabajo de Dani no daban crédito a la terrible noticia. El joven de 25 años fallecía este sábado en Portocolom al caer desde un tercer piso, el de su casa, a la que trataba de acceder al haberse olvidado las llaves. El chico era muy conocido en la zona y su fallecimiento ha provocado gran consternación y dolor, especialmente entre las personas con las que compartía oficio. Dani trabajaba en el restaurante Bocoi y, según sus compañeros, era un gran profesional y sobre todo una persona «generosa y de gran corazón».
El fallecido regresó el sábado por la tarde, en torno a las siete, a su casa. En ese momento se percató de que no llevaba las llaves encima y trató de entrar desde la terraza, atando unas toallas, pero cayó al vacío.
El golpe fuerte alertó a los vecinos, que se encontraron al chico tendido en el suelo, e inconsciente. Al llegar los servicios sanitarios, la víctima se hallaba en estado muy grave, y pese a los intentos de reanimación, lamentablemente falleció.
Hoy sus compañeros recuerdan a Dani como «un pilar fundamental en nuestra cocina y un miembro muy querido de la familia de Bocoi. No solo era un chef con pasión y mucho talento, sino que también era una persona cariñosa e increíblemente generosa». El restaurante permanecerá cerrado hasta el miércoles en señal de luto.
El joven, de nacionalidad peruana, llegó a Mallorca hace solo unos años, unos «cuatro o cinco», recuerda una de sus compañeras, quien comparte que antes de encontrar su pasión en la cocina, estuvo trabajando como socorrista.