Vecinos del edificio María Elena I de Magaluf, donde un turista británico ha resultado herido al precipitarse al vacío tras colarse por el hueco de una valla en mal estado, llevan casi un año advirtiendo al Ayuntamiento de Calvià del peligro que conllevaba dicha situación. «Sabíamos que algún día podía ocurrir una desgracia y mira lo de este sábado», sostienen.
El 29 de mayo de 2023 reportaron a través de la App Línea Verde la incidencia de la caída de una valla metálica que rodeaba buena parte del edificio residencial y les separaba de un paseo peatonal. La solución parecía que temporal, aunque se ha prolongado en el tiempo, fue colocar una elemento de plástico que ocultaba el hueco, pero no arreglaba casi nada.
El pasado jueves, hace apenas dos días, los residentes volvieron a contactar con el consistorio para recordarles el peligro que había ya que por esa zona, y ya iniciada la temporada turística, «suelen concurrir turistas bebidos de madrugada», dada la cercanía del edificio con la zona de Punta Ballena. Esperaban respuesta y no llegó. Y a primera hora de este sábado pasó lo que sabían que iba a ocurrir algún día.