Sus estafas a poderosos y medianos inversores en los años 80 y 90 fueron sonadas. Y su vida fue de película. Tanto, que un director de cine se inspiró en su historia para un film. Ha muerto en Mallorca a los 63 años Jürgen Harksen, un exconvicto que huyó de la Justicia y se refugió en Sudáfrica.
El fallecimiento de Jürgen, que era muy conocido en su país, se produjo el martes en su casa de Palma, según ha informado su abogado, Gerhard Strate. El exestafador nació en Flensburg, Alemania, y desde joven se aficionó al lujo más extremo. Viajes, coches de lujo, mansiones y un derroche continuo, que al final acabó financiando con estafas piramidales.
En sus años anteriores a su caída en desgracia, y merced a ese estilo de vida alocado, se codeó con relevantes personajes de la jet set internacional. Sin embargo, las cosas empezaron a torcerse cuando un tribunal de Hamburgo lo condenó a una pena de cárcel por un delito de fraude.
Para no ingresar en la prisión huyó a Sudáfrica, escapando de la justicia germana por un tiempo. Su caso fue muy sonado y saltó a las primeras páginas de los periódicos. El director de cine Dieter Wedel, que también vivió en Mallorca, como Jürgen, se inspiró en él en una de sus cintas, pero el resultado no fue del agrado del exinversor, que criticó la violencia y las armas que aparecían en el film.
El fallecido siempre reconoció su pasado turbio, pero insistía en que era joven y que no estaba orgulloso de lo que había hecho. En Mallorca llevó una vida mucho más tranquila, e intentó pasar más desapercibido. Lejos de las fiestas de los años 80, cuando era todo un personaje.