Un joven marroquí, que se encontraba en situación irregular en España, ha aceptado este martes la expulsión del país tras reconocer que robó el móvil y agredió a un hombre en Palma el pasado mes de diciembre. El destierro sustituye a la pena de dos años de prisión. El procesado dio el visto bueno al acuerdo alcanzado por su defensa, ejercida por el abogado Alejandro Serra, con la representante de la Fiscalía antes de iniciarse la vista.
El suceso se remonta a las 15.30 horas del 26 de diciembre de 2023 en la calle Bisbe Bernat Nadal. El acusado mantenía una tensa relación con un varón de la zona. Ese día este se encontró al magrebí y se acercó a él para intentar arreglar las cosas. Pero ocurrió todo lo contrario. El joven le golpeó en la cara y la arrebató el teléfono móvil que portaba en la mano, valorado en 250 euros.
Tras eso, el delincuente huyó del lugar, pero fue localizado por agentes de la Policía Nacional apenas media hora después y fue arrestado. Horas después se ordenó su ingreso en prisión, donde se encuentra a día de hoy. El acusado deberá indemnizar a la víctima con 139 euros, el precio que pagó por un móvil nuevo minutos después de sufrir el robo.