Eder García, jefe de los Bombers de Palma, lleva un año y medio en el cargo. Nació en Lleida y es licenciado en Ingenieria Industrial. Tras su paso por los Bombers de Barcelona y Generalitat fue la persona elegida para afrontar la dirección del Cuerpo de referencia de Balears.
Tras lo ocurrido en Valencia la pregunta es oblidada. ¿Puede suceder lo mismo en Palma?
—Es poco probable que ocurra un incendio de estas características en Palma. Ya que tienen que coincidir una serie de factores que por suerte es difícil que coincidan. Hay que recordar que se cambiaron las normativas de construcción precisamente para evitar que se produzcan incendios como el de Valencia en los que el fuego se propaga por la fachada.
¿Están los Bombers de Palma preparados para afrontar un incendio de estas características?
—Tenemos recursos suficientes y estamos preparados, como lo están el resto de bomberos. Disponemos de protocolos de actuación específicos, pero este tipo de incendios sobrepasan, de mucho, cualquier servicio de extinción y en Valencia se vio.
¿Tiene explicación lo que sucedió en la catástrofe que ha asolado Valencia?
—Una catástrofe como esta no solo depende de una causa, sino que hay varias. La primera y la más evidente es la propagación por fachada por los materiales constructivos de la fachada ventilada, luego el salto por fachada vía toldos y una intensidad del viento muy alta en un edificio aislado del resto. Esta conjunción de factores provocaron la catástrofe que se vio.
¿Cuál es la mayor dificultad para enfrentarse a este tipo de incendios?
—Lo malo de este tipo de incendios es que dentro del edificio es muy arriesgado actuar y la alternativa es trabajar desde el exterior, por el peligro de la fachada y por las condiciones de temperatura y de humos
¿Cuántos bomberos hay en la actualidad en el cuerpo de Palma?
—Somos unos 210 profesionales, de los cuales 190 son operativos, entre las diferentes categorías. Nos dividimos entre cuatro turnos, entre los que nos repartimos los 365 días del año. Cada turno trabaja 24 horas. Nuestra línea roja, es garantizar los servicios mínimos, que son de 35 diarios.
¿Cuentan con una plantilla suficiente como para cubrir todos los servicios?
—En este caso, hay que puntualizar que somos suficientes como para cubrir los servicios mínimos diarios. Como ya he dicho, siempre garantizamos un mínimo de 35 bomberos y con éste número somos capaces de cubrirlos. Ahora bien, lo conseguimos con un sobresfuerzo. Esto se traduce en un exceso de horas extra porque no somos los suficientes como para cumplir todos los turnos. Tenemos un estudio hecho en el que nos faltan unos 140 bomberos para trabajar de una manera normal.
¿Y se va a cubrir esa necesidad?
—Desde el Consistorio de Palma se está trabajando para ello, pero hay unas leyes que limitan a nivel municipal el agrandamiento de las administraciones públicas. Desde Cort nos prometieron que se iban a cubrir a lo largo de esta legislatura.
Lleva algo más de un año al frente de los Bombers de Palma, ¿Cómo se encontró el Cuerpo?
—Lo primero, había que modernizar el Cuerpo. Elaborar un grupo más eficiente y adaptarlo a las necesidades actuales de incendios, accidentes o auxilios. Siempre se ha tenido la visión reactiva de que los bomberos donde solo actúan una vez dado el incidente y queremos crear un cuerpo proactivo que esté preparado antes de realizar el servicio.
¿Cómo se moderniza el cuerpo?
—Hay muchos aspectos en los que trabajar: vehículos, materiales formación, procedimientos etc...Es muy importante las prácticas, simulacros y actividades de prevención.
¿Cuántas actuaciones realizaron durante el pasado año 2023?
—Cerca de 3.600. Cada año van aumentando a ritmo que va creciendo la población y van creciendo tanto en número como en complejidad.